Un grupo de independentistas se ha manifestado contra Carlos III durante el recorrido que el nuevo rey de Inglaterra ha realizado por Cardiff, en Gales. Los manifestantes se han situado a la altura del castillo y llevaban pancartas pidiendo poner fin al cargo de príncipe de Gales, y con el lema "Rey? No gracias", y "Democracia real". Es un hecho sin precedentes.
Una de las organizadoras de la protesta ha sido la exdiputada del partido independentista Playd Cymru, Bethan Sayed, que ha reconocido que inicialmente no tenía prevista ninguna movilización, pero que cambió de opinión cuando "el rey declaró que habrá un nuevo príncipe de Gales, que será declarado sin ningún tipo de discusión con el pueblo de Gales". "Creo que tenemos que venir aquí hoy de una manera tranquila con carteles que dicen que necesitamos una democracia real, que significa un futuro sin monarquía", ha añadido.
Este es el momento que Carlos III anunció que su hijo Guillermo sería príncipe de Gales, en un discurso parcialmente en galés en el Parlamento de esta nación, el Senedd. Nadie conocía esta decisión.
Por otra parte, mientras los británicos hacen colas kilométricas en Londres, que se alargan en según qué momentos durante más de 10 horas y cruzan la ciudad más allá del London Bridge, para despedir a la Reina, la casa real ultima los detalles del funeral de Isabel II. Este tendrá lugar el próximo lunes 19 de septiembre, 11 días después de que muriera una de las monarcas más influyentes del mundo y será un acontecimiento sin precedentes, con más de 2.000 invitados y un protocolo muy estricto. Con todo, los británicos que no estén invitados también verán su vida afectada, más allá de los dos minutos de silencio que está previsto que se efectúen en todo el país. Y es que algunos hospitales británicos han cancelado citas y operaciones, después de que se haya declarado el día del funeral de la soberana festivo para todo el Reino Unido.
De esta manera, según informa la BBC, las citas médicas que estaban planeadas para este lunes quedarán canceladas, menos en los casos que estos sean muy urgentes. A este hecho se le tiene que añadir que con el funeral, también cerrarán la mayoría de farmacias de todo el país. Con todo, también habrá excepciones, como en Gales, ya que el gobierno ha especificado que su actividad será la normal de cualquier día festivo.
Una de las situaciones más extremas, que mucha gente fuera del Reino Unido y también dentro de sus fronteras no acaba de comprender, es el hecho de que el aeropuerto de Heathrow, el más próximo a Londres, modificará su actividad para respetar también los dos minutos de silencio por la Reina y mientras se alargue la ceremonia religiosa en la abadía de Westminster. Concretamente, está previsto que se modifique un 15% de su actividad, para que no pasen aviones por encima de la capital que puedan interrumpir con su ruido un momento tan solemne.