Miles de personas se han manifestado este domingo en Malmö (Suecia), ciudad que esta noche acoge la final de Eurovisión 2024, para pedir la expulsión de Israel del certamen. Horas antes de que empiece la gala, y en medio de un caos dentro del festival por la descalificación de Países Bajos por parte de la Unión Europa de Radiodifusión (UER), se ha organizado esta concentración multitudinaria, que ha defendido la libertad del pueblo palestino. Bajo el lema 'Por la paz y por una Palestina libre', los manifestantes han recorrido las calles de la tercera ciudad sueca en población para denunciar la presencia de la candidatura israelí en Eurovisión, que ha generado polémica desde el primer día.

Se trata de la segunda protesta multitudinaria en Malmö en defensa del pueblo palestino desde que la ciudad acoge el certamen musical. En esta ocasión, han participado en la marcha personas llegadas de varias partes de Suecia y también de Dinamarca, así como grupos de eurofans que han viajado hasta la ciudad para vivir el festival en directo. Durante el recorrido, se han coreado cánticos en contra de la guerra en Gaza, lemas pidiendo el boicot a Israel y también se han lanzado mensajes críticos contra la Unión Europea de Radiodifusión por permitir la participación de Israel, que será una de las aspirantes a llevarse el micrófono de cristal.

Esta no es la primera manifestación en contra de Israel en Malmö. De hecho, el pasado jueves miles de personas se concentraron en el centro de la ciudad, el mismo día que la representante israelí, Eden Golan, participaba por primera vez en el festival de Eurovisión, en el marco de la segunda semifinal. A pesar de la protesta, que reunió figuras como el activista Greta Thunberg, Golan consiguió pasar a la final, que se disputa este sábado.

Más allá de las movilizaciones, algunos de los artistas participantes en Eurovisión también se han posicionado a favor del pueblo palestino durante las últimas semanas. Es el caso de la candidatura irlandesa liderada por Bambie Thug, quien este sábado ha puesto en duda su participación en la final, a pesar de haberse clasificado. "Se ha producido una situación mientras esperábamos para saltar al escenario y participar en el desfile de artistas, por lo cual he requerido una atención urgente de la UER, quien se ha tomado este asunto de verdad y hemos discutido sobre qué acción emprender", ha explicado la cantante, que no se ha presentado al ensayo final del festival.

La posible no participación de Irlanda en la gran final se suma a la polémica generada por la expulsión de Países Bajos, después de que la UER señalara un "comportamiento inapropiado" del representante, Joost Klein, quién se hizo viral en redes por una escena con un mensaje crítico hacia la candidata israelí durante una rueda de prensa. De momento, la organización de Eurovisión se ha reunido de urgencia ante las reacciones de esta suspensión, que han sido masivas.