Los Estados Unidos están reviviendo en mayo del 2020, cuando en plena pandemia del coronavirus, un agente de la policía mató en Gorge Floyd, un hombre negro que se convirtió en un símbolo contra el racismo y la violencia policial, muy extendida en este país. Aunque de momento las manifestaciones no son tan multitudinarias como cuando murió Floyd y reavivó el movimiento Black Lives Matter, la muerte de otro joven afroamericano en Memphis después de que cinco agentes de la policía lo apalearan ha hecho que los norteamericanos hayan vuelto a salir a la calle a denunciar unas muertes que pasan demasiado a menudo. En este caso, los autores de la paliza eran cinco agentes, también afroamericanos, y el joven murió al principio de enero, pero después de que las autoridades difundieran el vídeo de la brutal agresión, el caso se ha hecho más mediático y el viernes por la noche, las protestas se fueron sucediendo en varias ciudades de los Estados Unidos.
En las últimas horas, en Memphis, donde tuvo lugar la paliza mortal, centenares de personas bloquearon el tráfico en una autopista de la ciudad a grito de "sin justicia no hay paz". El fiscal general del país ya anunció que analizarán e investigarán el suceso, mientras los cinco policías están actualmente encarcelados. En Nueva York, la manifestación tuvo lugar en Times Square, uno de los puntos más emblemáticos de la ciudad, justo en medio de Manhattan, mientras que en Washington, centenares de personas (sobre todo jóvenes) se congregaron delante de la Casa Blanca con carteles contra el terror policial, pidiendo que los policías pagaran para sus actos y consiguió justicia para Tyre Nichols, la víctima.
La reacción de Joe Biden y los consejos de la Casa Blanca
Los vídeos, algunos grabados desde cámaras de seguridad a las farolas y de otros con los aparatos que los mismos policías llevaban|traían a su uniforme, son muy duros. En él, se escucha cómo la víctima pide clemencia a los policías y también como llama, desesperado, a su madre. Según los agentes, lo pararon por haber cometido una supuesta infracción de tráfico, que le costó la vida. Después de haber visto las imágenes, Joe Biden se mostró conmocionado y muy dolido, en un comunicado. "Me he sentido indignado y profundamente dolido al ver el horrible vídeo de la paliza que le ha causado la muerte a Tyre Nichols", ha reconocido desde la Casa Blanca. "Mi corazón está con la familia de Tyre Nichols, con todos los americanos en Memphis y con todo el país que está de luto por esta pérdida tan dolorosa", ha continuado al demócrata, que también ha explicado que en las últimas horas ha podido hablar con la madre y el padrastro del joven apaleado: "No hay palabras para describir el dolor que supone perder a un hijo amado y un padre joven", ha asegurado Biden en el mismo texto.
Desde la administración de Biden, con el recuerdo de las protestas por la muerto de Gorege Floyd durante el mandato de Donald Trump todavía en mente, han hablado con los alcaldes de las principales ciudades del país y también con aquellos donde vive más población negra para prepararlos ante las manifestaciones que se esperan para estos días. "Los alcaldes han compartido sus perspectivas sobre como de importante es reconocer el dolor que está atravesando las comunidades en todo el país y estar preparados para darles apoyo", han explicado en un comunicado.