El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha dicho que la invasión de Ucrania a la región rusa de Kursk muestra que las amenazas de represalias del Kremlin son un engaño. Además, ha instado también a los aliados de Kyiv a relajar las restricciones al uso de sus armas contra objetivos en territorio ruso. Zelenski ha destacado que las fuerzas ucranianas habían ganado el control de más de 1.250 kilómetros cuadrados y 92 asentamientos en Kursk.

En declaraciones a los diplomáticos ucranianos, el presidente ha destacado que el "concepto ingenuo e ilusorio de las llamadas líneas rojas" se había "hundido". Pero las restricciones impuestas por los aliados continúan vigentes, y Zelenski ha pedido a los aliados ser más audaces a la hora de ayudar a Ucrania. "El mundo ve que todo en esta guerra solo depende del coraje: nuestro coraje, el coraje de nuestros socios. De decisiones valientes para Ucrania, del coraje para dar apoyo en Ucrania".

Ucrania ha destruido un tercer puente sobre el río Seym a Kursk, como aparte de un aparente intento de expandir lo que Zelenski ha descrito como una "zona de amortiguación" militar dentro de Rusia.

Kyiv sigue defendiendo el territorio

En este sentido, las fuerzas de Kyiv siguen a la defensiva en Ucrania, luchando ferozmente en torno a la estratégica ciudad oriental de Pokrovsk, donde Rusia ha avanzado de forma constante en las últimas semanas. Según informes, lunes las tropas rusas eran a unos 10 kilómetros de las afueras, ha destacado Serhiy Dobriak, jefe de la administración militar local. Los civiles con niños pequeños en brazos y cargando pesadas maletas huyeron el lunes de Pokrovsk siguiendo órdenes de evacuación. Las autoridades locales han destacado que las fuerzas rusas adelantaban tan deprisa que las familias han recibido ya instrucciones de abandonar la ciudad y otras localidades próximas a partir del martes. Unas 53.000 personas todavía vivían en Pokrovsk, según han destacado las autoridades, y algunas habían decidido marcharse inmediatamente.

El general de más rango de Ucrania dijo que Kyiv también "estaba haciendo todo el necesario" para defender la ciudad oriental de Toretsk, mientras Moscú intenta amenazar las líneas de suministro ucranianas. Rusia dijo que sus fuerzas habían capturado la próxima ciudad de Zalizne.

Rusia no quiere tener conversaciones de paz con Ucrania

Por otra parte, Moscú descarta por ahora las conversaciones de paz. El asesor presidencial ruso Yuri Ushakov ha destacado que Rusia no estaba a punto para mantener conversaciones de paz con Ucrania por ahora. Especialmente, después del ataque a Kursk. Ucrania, además, ha exigido la retirada total de las tropas rusas de su territorio antes de sentarse a negociar. En este sentido, las conversaciones no parecen tener un horizonte próximo.