Vladímir Putin ha acordado con Donald Trump un alto el fuego sobre objetivos energéticos en Ucrania durante los próximos treinta días, después de la conversación telefónica de este martes. "Putin ha impartido enseguida la orden correspondiente a los militares rusos", ha informado el Kremlin, que también ha asegurado que el presidente ruso está dispuesto a acordar con su homólogo de Estados Unidos las vías de solución al conflicto ucraniano. Según la Casa Blanca, la tregua energética y en infraestructuras sería el inicio del camino hacia la paz entre Rusia y Ucrania.

Por el lado de EE.UU., se ha difundido el resumen de la conversación de este martes, en la cual se ha acordado empezar negociaciones técnicas de cara a la implementación de un alto el fuego marítimo en el mar Negro, un alto el fuego total y una paz permanente. Estas negociaciones empezarán "inmediatamente" en el Oriente Medio, según la Casa Blanca. El Kremlin ha añadido que este miércoles habrá un intercambio de 350 prisioneros de guerra entre Rusia y Ucrania, a la vez que ha puesto condiciones para el inicio de las nuevas conversaciones: el cese total de la ayuda militar extranjera a Ucrania, así como el suministro de datos de inteligencia. Son dos "condiciones clave" para evitar una escalada del conflicto y, así, conseguir una solución politicodiplomática.

Conversaciones de paz en Oriente Medio

"Los dos líderes han coincidido en que este conflicto debe concluir con una paz duradera. También han destacado la necesidad de mejorar las relaciones bilaterales entre EE.UU. y Rusia. El dinero y la sangre que Ucrania y Rusia han gastado en esta guerra se invertirían mejor en las necesidades de sus pueblos", ha dicho la nota de la Casa Blanca. En el mismo comunicado, se destaca que Trump y Putin "han hablado ampliamente sobre Oriente Medio como una región de potencial cooperación para prevenir futuros conflictos". "Además, abordaron la necesidad de detener la proliferación de armas estratégicas y colaborarán con otras para garantizar su aplicación más amplia. Los dos han coincidido en el hecho que Irán nunca debería estar en condiciones de destruir Israel", ha añadido. Finalmente, los dos presidentes han estado de acuerdo en la idea que "un futuro con una mejor relación bilateral entre EE.UU. y Rusia ofrece enormes ventajas", que incluyen "importantes acuerdos económicos y estabilidad geopolítica una vez alcanzada la paz" en Ucrania.

Por parte de Rusia, Putin ha valorado "positivamente" la propuesta de Trump para suspender durante treinta días los ataques contra la infraestructura energética. El comunicado del Kremlin ha asegurado que su dirigente se ha pronunciado a favor de una solución pacífica al conflicto y a favor de trabajar conjuntamente con EE.UU. en la búsqueda de "posibles vías de solución" que deben tener un carácter "integral, sólido y duradero". "Y, por supuesto, tener en cuenta la necesidad incondicional de eliminar las causas primigenias de la crisis y los intereses legítimos de Rusia en el ámbito de la seguridad", ha concluído.

Casi tres horas de conversación

La conversación ha acabado hacia las seis menos cuarto de la tarde (hora de Barcelona), según el Kremlin. Antes, cuando ya hacía una hora que hablaban, desde la Casa Blanca se había informado de que la llamada iba "bien" y que seguía "en curso". El mismo mensaje indicaba que la llamada había empezado a las diez de la mañana en Washington (las tres de la tarde en Barcelona), de manera que ha durado unas tres horas. El Kremlin ya había dicho que los dos dirigentes hablarían "tanto como consideren conveniente".

El portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, había informado antes de la conversación que Putin y Trump abordarían tanto una solución pacífica al conflicto ucraniano como la normalización de las relaciones bilaterales. "Hay muchos asuntos, desde la normalización de las relaciones bilaterales hasta el arreglo ucraniano. Todo esto será tratado por los dos presidentes", había dicho, en una rueda de prensa de este martes. Respecto a los preparativos, había admitido que han hecho falta "varios días" y que se ha consultado el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Mike Waltz.

Mucho trabajo durante el fin de semana

Trump anunció este domingo que la cita telefónica con Putin llegaba después de "mucho trabajo durante el fin de semana" para hacer avanzar las negociaciones de paz sobre Ucrania, mientras que el lunes se mostró confiando en la idea que este martes quizás tendrían "alguna cosa que anunciar" después de la llamada. La semana pasada, Kyiv ya aceptó una propuesta de Washington para un alto el fuego. Pero Moscú se limitó a decir que estaría dispuesto a abordar las dudas que genera la propuesta de tregua de 30 días, asegurando que ve muchos problemas en la aplicación y verificación de un alto el fuego, así como a la hora de evitar que los ucranianos aprovechen para reagruparse y rearmarse.

El presidente de EE.UU. pidió a su homólogo ruso que diera apoyo a la tregua: "Creo que estará de acuerdo. Realmente lo creo. Creo que lo conozco bastante bien y que estará de acuerdo". Y, si no aceptara, añadió que sería "una mala noticia por el mundo, porque está muriendo mucha gente". De hecho, también reclamó piedad para las tropas ucranianas que resisten en la región rusa de Kursk y la respuesta del Kremlin fue que se les perdonaría la vida si se entregaban. En cualquier caso, esta ha sido la segunda conversación entre Trump y Putin desde el pasado 12 de febrero, cuando acordaron iniciar un proceso negociador para poner fin al conflicto en Ucrania.