El Kremlin ha demandado este martes a la Unión Europea (UE) y los Estados Unidos que dejen de presentar ultimátum en Georgia sobre las controvertidas elecciones legislativas del sábado pasado ganadas por el partido gobernante Sueño Georgiano, que aboga por un acercamiento a Rusia. "Eso, por descontado, son manifestaciones absolutamente repugnantes que se contradicen con las normas de las relaciones entre Estados que tienen que cesar", ha destacado Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, a la rueda de prensa diaria. Peskov ha acusado a la UE y los EE.UU. de "presentar literalmente ultimátum los dirigentes georgianos".
"A las elecciones ganó aquel a quien los ciudadanos de Georgia le otorgaron el voto. Nosotros no tenemos derecho ni deseos ni intención de interferir en los asuntos internos de Georgia. No lo hemos hecho nunca", ha destacado. La oposición georgiana acusó al Servicio Federal de Seguridad (FSB) de Rusia de orquestar la victoria de Ensueño Georgiano en los comicios parlamentarios.
Críticas de la UE y los EE.UU. a los resultados de las elecciones
La Unión Europea (UE), que congeló las negociaciones de ingreso con el país caucásico por su acercamiento a Moscú, ha pedido en Tbilisi que investigue las presuntas "irregularidades" cometidas durante la votación y el escrutinio. Mientras tanto, los EE.UU. secundaron los llamamientos europeos al gobierno georgiano, al cual Washington acusó de "mal uso de los recursos públicos, compra de votos e intimidación de los votantes". Según el Departamento de Estado, "eso contribuyó a crear condiciones desiguales y socavó la confianza pública e internacional en la posibilidad que los resultados fueran justos". Mientras tanto, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha afirmado hoy en Tblisi que las elecciones parlamentarias georgianas han estado "libres y democráticas".
La presidenta georgiana, Salomé Zurabichvili, denunció el lunes al mitin de protesta convocado ante el Parlamento que las elecciones parlamentarias del sábado pasado fueron "robadas" por Sueño Georgiano y prometió el retorno de la nación caucásica "al camino europeo". "No perdimos las elecciones, nos robaron los votos, nos robaron el futuro", habría declarado.
Después del anuncio de la victoria de Ensueño Georgiano, las cuatro coaliciones opositoras que accedieron al Legislativo se negaron a reconocer los resultados de las elecciones y anunciaron su boicot a la formación del nuevo Parlamento.
Manifestaciones proeuropeas
En este contexto, la oposición proeuropea se ha movilizado desde el mismo sábado para denunciar el posible fraude electoral. Miles de georgianos salieron a las calles de la capital, Tbilisi, para denunciar irregularidades en el proceso electoral, incluyendo intimidación de los votantes. La presidenta pro-occidental de Georgia, cuyo papel es en gran parte ceremonial, ha sido una de las voces que han liderado estas protestas y ha afirmado que el país ha caído en una "operación especial rusa" con el objetivo de devolverlo a la órbita de Moscú y descarrilarlo su plan de adhesión a la Unión Europea.