El presidente ruso, Vladímir Putin, ha iniciado este jueves en Hanói la visita a Vietnam con una reunión con el presidente del país, To Lam, y otros líderes de la cúpula comunista, con quien firmará una declaración conjunta y acuerdos de energía, medicina y educación. Durante la reunión con el mandatario vietnamita y una delegación de autoridades, Putin ha recalcado que Rusia concede "una gran importancia" al diálogo con la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN), de la cual Vietnam es "un miembro visible", según un vídeo difundido por el Kremlin.

El mandatario ruso, que ha aterrizado esta madrugada en Hanói después de su viaje oficial a Corea del Norte, ha intentado mostrar la proximidad de Rusia con Vietnam. De esta manera, ha recordado que el año que viene marca el 75.º aniversario de las relaciones diplomáticas entre los dos países y los 50 años de la reunificación del país después de la victoria del Norte comunista (y apoyado por Moscú) delante del Sur pronorteamericano.

Putin ha recordado que en el 2025 también se celebrarán los 80 años de la victoria aliada a la Segunda Guerra Mundial (renombre grande guerra patriótica en Rusia) e invitó a su homólogo vietnamita a participar en las celebraciones que tendrán lugar en Moscú. Según ha declarado a los medios vietnamitas el embajador ruso a Vietnam, Gennady Bezdetko, Vietnam y Rusia firmarán una declaración conjunta y tienen previsto firmar acuerdos relacionados con la medicina, la educación y la energía.

En el apartado energético, en el que los dos países colaboran desde hace décadas, Bezdetko ha indicado que Moscú está dispuesto a proporcionar a Vietnam tecnología avanzada para obtener "energías limpias". Según ha publicado Putin en el diario del Partido Comunista vietnamita, la gasística rusa Novatek planea proyectos de gas en el país asiático, mientras que la corporación nuclear estatal Rosatom prevé crear un centro para la energía y las tecnologías nucleares. La delegación rusa incluye a los ministros de Exteriores, Serguei Lavrov, y de Energía, Serguei Tsiviliov; el viceministro de Defensa, Alexandr Fomin, y el director de la agencia federal de cooperación tecnicomilitar, Alexandr Mijéev.

Los EE. UU., en contra de la visita de Putin a Vietnam

Igual que en el caso de Corea del Norte, los Estados Unidos, que han mejorado notablemente los últimos años sus relaciones con las autoridades vietnamitas, han criticado la visita del líder ruso, contra el cual pesa una orden de arresto de la Corte Penal Internacional por supuestos crímenes de guerra en Ucrania.

Los presidentes de los EE. UU., Joe Biden, y China, Xi Jinping, visitaron el pasado año Vietnam, país que quiere diversificar su política exterior mediante lo que se conoce como la "diplomacia de bambú".

La visita oficial este jueves del presidente de Rusia a Vietnam es la primera en más de una década y demuestra la buena relación que ambos países mantienen desde hace décadas y pone a prueba los equilibrismos diplomáticos del Vietnam para llevarse bien con todas las potencias.

¿Qué unión hay entre Rusia y Vietnam?

Rusia hoy es uno de los siete países con los que Vietnam tiene un acuerdo de Asociación Estratégica Integral, proximidad que la Federación Rusa heredó de la URSS. El apoyo armamentístico soviético al Vietnam comunista fue fundamental en sus guerras contra Francia y los Estados Unidos, una relación privilegiada que se mantuvo durante los 80, cuando la ayuda soviética ayudó a Vietnam a bregar con la miseria de la posguerra y el aislamiento internacional.

En palabras del viceprimer ministro Tran Hog Ha a su homólogo ruso Dmitri Chernyixenko en un encuentro el año pasado: "Vietnam no olvidará nunca el apoyo del pueblo ruso". Vietnam mantiene en la última década una política exterior denominada "diplomacia de bambú" por su capacidad para mantener buenas relaciones con las grandes potencias, evitando tomar partido, mostrándose flexible y aprovechando su posición estratégica en beneficio propio.