Las horas de conversaciones en Arabia Saudí acabaron el martes con una declaración conjunta de los Estados Unidos y Ucrania, apoyando un cese del fuego de 30 días propuesto por los Estados Unidos en la guerra con Rusia. Los funcionarios de la administración Trump lo ven como un gran avance hacia los objetivos de política exterior de un líder que hizo campaña con la promesa de poner fin a la guerra. Para Ucrania, el anuncio conjunto supone un alivio crucial para el presidente Volodímir Zelenski después del ataque humillante a la Oficina Oval hace quince días por parte de Trump y el vicepresidente J.D. Vance. Para Moscú, eso traslada la responsabilidad a ellos mientras la guerra misma se intensifica. Hasta ahora, sin embargo, solo Ucrania ha dicho que sí a una propuesta que solo tiene ocho párrafos, con pocos detalles más allá del deseo de avanzar rápidamente. ¿En este sentido, es posible el alto el fuego? ¿Y si es así, puede poner punto final a la guerra?

Los puntos clave del alto el fuego en Ucrania
Ucrania expresó su disposición a aceptar la propuesta norteamericana de promulgar un alto el fuego provisional inmediato de 30 días, prorrogable de mutuo acuerdo entre las partes y sujeto a la aceptación e implementación simultánea por parte de la Federación Rusa. Los Estados Unidos comunicarán a Rusia que la reciprocidad rusa es clave para conseguir la paz.
En este sentido, de esta declaración anterior, la palabra clave es “inmediato”, algo que no deja ninguna duda: Trump quiere que se dejen las armas ya. Sin embargo, su sentido de urgencia ha generado a menudo preocupación en Europa. Muchos temen que apresurarse el resultado deseado sin acordar primero los términos saca presión militar en Moscú como potencia invasora y podría hacer que se aproveche de una tregua. El temor radica en llevar a Ucrania a una rendición efectiva, destaca la cadena británica BBC. La teoría es que Rusia —la potencia mayor, más poblada y militarmente más autosuficiente— podría beneficiarse de una tregua sin establecer concesiones previas para consolidar sus fuerzas, prolongar un proceso de negociación y esperar a ver qué pasa políticamente con Trump durante su mandato mientras se aferra a todo aquello que se apoderó; e incluso entonces intentar ganar más terreno, consolidando su ocupación actual y potencialmente aprovechando una fractura en la alianza occidental para amenazar una mayor parte de Europa.
El proceso de negociación de los términos antes de un alto el fuego en los conflictos puede ser importante para garantizar que las partes conviertan las amenazas militares actuales en ganancias estratégicas significativas. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ya había intentado persuadir a los norteamericanos de que no se puede confiar en el presidente ruso Vladímir Putin, como lo demuestra el hecho de que rompió los Acuerdos de Minsk apoyados por Europa después de apoderarse de territorio ucraniano en el 2014. Trump desestima estas preocupaciones, afirmando que habrá seguridad para Ucrania, pero sin especificar como. Ha dicho que Putin se verá disuadido y se encuentra en una posición difícil, sin ninguna otra opción que llegar a un acuerdo por razones que solo él conoce. Rubio decía el martes que la delegación norteamericana tuvo discusiones sustanciales con los ucranianos sobre el fin permanente de la guerra, incluyendo “qué tipo de garantías tendrán para su seguridad y prosperidad a largo plazo”, pero no se saben más detalles.

Los Estados Unidos levantarán inmediatamente la pausa en el intercambio de inteligencia y reanudarán la asistencia de seguridad a Ucrania. Y de hecho, tal como señala la BBC, esta es la gran victoria por Zelenski que ve los suministros de armas por parte de los EE.UU. restablecidos. Fundamentalmente, eso también significa que Washington volverá a compartir sus datos de inteligencia e imágenes satelitales con Kyiv, cosa que le ayuda a localizar posiciones rusas. La Casa Blanca dijo que suspendía esta ayuda porque consideraba que Zelenski no estaba “comprometido” con el plan de paz de Trump. El líder ucraniano intentó expresar sus preocupaciones basándose en algunas de las razones mencionadas al ser expulsado del Despacho Oval. Es probable que vuestras reservas se estén dejando de lado, mientras celebra el acuerdo en esta forma, un precio necesario a pagar para restablecer la asistencia norteamericana en materia de seguridad.
Por otra parte, las dos delegaciones acordaron nombrar sus equipos negociadores e iniciar inmediatamente las negociaciones para conseguir una paz duradera que garantice la seguridad a largo plazo de Ucrania. Los Estados Unidos se comprometieron a debatir estas propuestas específicas con representantes de Rusia. La delegación ucraniana reiteró la participación de los socios europeos en el proceso de paz. Y eso es un poco confuso porque no claro está si se refiere a las negociaciones entre Ucrania y los Estados Unidos para establecer garantías de seguridad para Ucrania, o si se refiere a las negociaciones entre Ucrania y Rusia para poner fin de forma permanente a la guerra una vez esté en marcha un alto el fuego.

“Los presidentes de los dos países acordaron concluir cuanto antes mejor un acuerdo integral para el desarrollo de los recursos minerales esenciales de Ucrania, con el fin de expandir su economía y garantizar su prosperidad y seguridad a largo plazo”. Este fue el acuerdo que nunca se firmó después de que le dijeron a Zelenski que abandonara la Casa Blanca el mes pasado. Eso daría a los Estados Unidos una participación futura en algunos de los depósitos minerales estatales de Ucrania, así como ingresos provenientes del petróleo y el gas. Trump lo ve como una garantía de seguridad efectiva para Ucrania, según destaca la misma cadena británica.
“La delegación ucraniana reiteró la profunda gratitud del pueblo ucraniano al presidente Trump…”. Esta es una línea clave que podría ayudar a explicar la rehabilitación de Zelenski en los ojos de la Casa Blanca. Ahora, Trump tiene un agradecimiento oficial ucraniano, en un trozo de papel destinado a hacer las paces.