Luigi Mangione ha sido acusado formalmente este jueves de asesinato, tenencia de armas y dos delitos de acoso por matar a disparos al director ejecutivo de la aseguradora UnitedHealthcare, Brian Thompson, en plena luz del día en el centro de Nueva York el pasado 4 de diciembre. Luigi Mangione ha sido imputado de asesinato en primer grado, un cargo generalmente reservado para el asesinato de policías o para asesinos en serie.

Este asesinato a sangre fría ha tenido una reacción inesperada entre buena parte de la sociedad estadounidense, ya que muchas personas recibieron con desprecio la muerte del dirigente de una de las aseguradoras médicas privadas más grandes del país y de las que más tratamientos deniega a sus clientes. La policía de Nueva York fue una semana tras la pista de la persona que disparó tres balas en Thompson y desapareció entre las calles de la gran ciudad. Finalmente, detuvieron un joven de 26 años llamado Luigi Mangione. ¿Qué se sabe de este presunto asesino y sus motivaciones?

Luigi Mangione (1998) es nativo de Baltimore, Maryland, y proviene de una familia acomodada de una de las zonas más prominentes de la ciudad. Medios locales recogen que el joven era un estudiante destacado en la secundaria y, de hecho, fue reconocido con el honor de dar el último discurso en su graduación. Posteriormente, también destacó en la Universidad de Pensilvania, donde estudió Ciencias Informáticas e Ingeniería y se graduó cum laude. Su última dirección era en Honolulú, Hawái.

'Deny, defend, depose': un crimen meditado

Desde el primer momento en que se informó del asesinato, la sospecha de que el motivo del crimen sería político estuvo sobre la mesa. Concretamente, contra el sistema de salud privada de salud de los Estados Unidos. La identidad de la víctima, jefe de una de las mayores aseguradoras médicas y que a menudo deniega tratamientos a sus clientes, ya apuntaba hacia esta dirección. Sin embargo, lo que lo acababa de confirmar eran los detalles del crimen que había dejado el mismo asesino. Las tres balas que disparó tenían grabada cada una de ellas una palabra: Deny, defend, depose ('negar, defender y deponer', en castellano). Según medios estadounidenses, las tres palabras se hacen eco de una frase común: "retrasar, negar, defender", que describe las acusaciones de las aseguradoras que evitan pagar las reclamaciones. De hecho, en el año 2010, el profesor de universidad Jay Frienman publicó un libro bajo el título Delay Deny Defend: Why, donde denunciaba la avaricia de las aseguradoras sanitarias.

Además de las balas grabadas, el asesino abandonó la mochila que llevaba en el momento de los hechos en Central Park, y en su interior dejó el abrigo que llevaba en el momento del crimen y billetes del Monopoly, según diversos medios estadounidenses.  Cuando Mangione fue detenido, la policía encontró, entre otras cosas, una especie de manuscrito de tres páginas donde sostienen que se expresaba "mala voluntad hacia las empresas americanas".

Justamente, el hecho de que todas estas pistas que ha dejado señalen hacia su oposición al actual sistema privado de salud de los Estados Unidos ha provocado que el asesino despierte mucha simpatía entre los ciudadanos estadounidenses en ambos lados del espectro político. Según informa la CNN, a pesar del contexto privilegiado de Mangione, el joven habría sufrido los efectos del sistema de salud privado de los Estados Unidos, ya que padecía de dolores de espalda desde hacía tiempo.

Luigi Mangione (2)
Luigi Mangione ha sido detenido por la policía en Pensilvania. EFE

Defendido por votantes demócratas y republicanos

Desde el primer momento en que tuvo lugar el asesinato, la reacción de buena parte de la ciudadanía estadounidense no fue de simpatía hacia Thompson, quien para muchos es una de las figuras que encarnan un sistema que deja a miles de personas al año sin acceso a la salud. Con cada detalle que la policía revelaba, como, por ejemplo, el detalle de las balas, más usuarios expresaban su apoyo al asesino, quien ha sido pintado como una especie de héroe. De hecho, muchas personas han justificado su apatía por la muerte del CEO compartiendo en las redes sus experiencias negativas con los seguros privados, incluido el propio UnitedHealthcare.

Algunos de los principales altavoces de la derecha trumpista han tratado de afirmar que esta ira contra Thompson y el sistema del cual era dirigente era solo una celebración "de la izquierda inmoral". Así lo ha hecho Ben Shapiro, uno de los principales comunicadores de la extrema derecha estadounidense. A través de su popular canal de YouTube, Shapiro ha afirmado que solo la izquierda celebra la muerte de Thompson, pero sus propios seguidores han desmentido su afirmación comentando en el vídeo que eran republicanos convencidos y celebraban los hechos. Hay votantes republicanos que han aprovechado este crimen para criticar el sistema de salud, mostrando cómo el rechazo al sistema sanitario es uno de los temas más transversales entre los americanos.

En internet, algunos usuarios han ensalzado la figura del tirador hasta el punto de dibujar ilustraciones del momento del asesinato, estampando camisetas con las palabras grabadas en las balas y haciendo memes. A modo de anécdota y para ilustrar el fenómeno de que la defensa de Mangione por parte de miles de usuarios ha calado, el McDonald's donde ha sido detenido está siendo bombardeado con malas críticas en Google y otras plataformas.

Por otra parte, y ante la celebración por parte de algunos ciudadanos del crimen, las autoridades han hecho un llamamiento a la empatía con la familia de Thompson. Josh Shapiro, gobernador de Pensilvania, ha declarado: "Una cierta atención en este caso, especialmente en línea, ha sido profundamente inquietante, ya que algunos han intentado celebrarlo en lugar de condenar a este asesino. […] En América, no matamos a personas a sangre fría para resolver diferencias políticas o expresar un punto de vista".

La huella digital de Mangione: ¿qué leía, escuchaba o tuiteaba?

La normalización del uso de las redes sociales y la presencia de las personas, especialmente de generaciones más jóvenes, en los espacios digitales hace que encontrar información de una persona no sea tan complicado como años atrás, y Mangione no es una excepción. A menudo se utiliza el concepto de huella digital para definir el conjunto de datos sobre sí mismos que dejan las personas en internet. Ya sea a través de publicaciones, me gusta o retuits, los usuarios de internet dejan información sobre gustos y fobias en las redes que puede ser relativamente fácil de rastrear. Justo esto ha ocurrido con el joven presunto asesino. En el momento en que la policía dio a conocer el nombre de Mangione, usuarios y medios saltaron a internet a tratar de encontrar sus perfiles en varias redes sociales para dibujar un perfil de este hombre para saber qué leía, escuchaba y publicaba.

Entre los perfiles en redes sociales que se han encontrado de Mangione se encuentra el de Goodreads, una aplicación para registrar y hacer reseñas de los libros que se leen. Allí se recogen varias reseñas de las lecturas del joven y de algunas de ellas se extraen algunos de sus posicionamientos políticos, muy críticos con el sistema capitalista. También se han encontrado sus perfiles en Twitter (ahora X) e Instagram, ambos borrados por las plataformas en cuanto empezaron a ganar masivamente seguidores. Sin embargo, muchas personas han guardado imágenes de los tuits y del propio Mangione en Instagram.