Elon Musk hace días que exige a través de su cuenta d'X la liberación del agitador de extrema derecha conocido como Tommy Robinson, encarcelado desde octubre por desacato, para difamar en repetidas ocasiones a un refugiado sirio, víctima de acoso cuando era menor de edad, en un vídeo publicado en redes sociales en el 2024, después de haber sido condenado por hacerlo en el 2021.
Musk niega las acusaciones hacia el ultra y da apoyo a su discurso, e incluso en varios tuits ha denunciado que "Robinson está en una prisión de confinamiento solitario para decir la verdad" y que "tendría que ser liberado, y aquellos que encubrieron esta injusticia tendrían que tomar su lugar en esta celda".
Robinson, de 41 años, es también uno de los artífices de los disturbios de extrema derecha que asolaron este verano varias ciudades del Reino Unido, basándose en información falsa sobre el origen del atacante que acabó con la vida de tres niños, y que se describe a él mismo como "un enemigo del estado británico". Da apoyo a la supremacía blanca, es contrario a la inmigración y antieuropeo.
De madre irlandesa y padre inglés, el agitador ha tenido problemas con la justicia desde bien joven, ya que fue condenado a los 21 años a 12 meses de prisión por agredir a un agente de policía fuera de servicio. Su nombre real es Stephen Yaxley Lennon, pero cuando era joven se lo cambió en homenaje a un miembro de un grupo de hooligans de Luton. Solía esconder su identidad bajo una máscara decorada con la bandera inglesa.
Desde joven ha sido vinculado con la extrema derecha y con el Partido Nacional Británico, y posteriormente, fundó la Liga de Defensa Inglesa (EDL, en inglés), de la que se desvinculó en el 2013, por discrepancias con algunos sectores. Según la Policía Británica, este grupo es uno de los principales artífices de la violencia en la calle en protesta por el asesinato de tres niños pequeños en una clase de baile en Southport, y lo integran neonazis confesos, supremacistas blancos, fundamentalistas cristianos y miembros diversos de la extrema derecha.
Problemas continuos con la justicia
Robinson hace años que tiene problemas con la justicia británica por todo tipo de causas. Desde el 2005 ha sido condenado a penas de prisión y a trabajos en beneficio de la comunidad, entre otras cosas, por peleas entre ultras del fútbol, viajar a los Estados Unidos con pasaporte ajeno, fraude hipotecario, posesión de drogas, comportamiento amenazador e incumplimiento de una orden judicial. En julio de 2021, el adolescente sirio Jamal Hijazi fue indemnizado con 100.000 libras al ganar una gran batalla por difamación contra Robinson, quien lo había tildado de violento a través de las redes.
Un juez le ordenó que no repitiera nunca las mentiras sobre Hijazi, pero el año pasado empezó a insistir en sus afirmaciones, incluso en un documental distribuido en línea en el cual se presenta el ultra como una víctima de la libertad de expresión, según explica la BBC. Robinson recibió en verano la orden judicial de presentarse ante los tribunales por haber ignorado al juez y haber cometido desacato. El líder de extrema derecha no se presentó y huyó del Reino Unido.
Finalmente, fue detenido el 26 de octubre nuevamente en territorio británico, justamente el día antes de una manifestación antirracista se celebró en Londres. El tribunal lo condenó a 18 meses de prisión para incumplir la orden judicial, y a pagar costas de 80.350 libras. El juez le ha permitido quedarle cuatro meses de condena si eliminaba las acusaciones falsas de sus redes sociales, pero el 7 de enero de 2025 sigue publicado el vídeo íntegro.