Noa Argamani, Almog Meir Jan, Andrey Kozlov y Shlomi Ziv son los cuatro rehenes israelíes que este sábado han podido volver a casa después de haber estado 245 días secuestrados por Hamás en la Franja de Gaza. Todos ellos fueron capturados el pasado 7 de octubre en el festival de música electrónica Nova, que fue uno de los blancos del ataque del grupo islamista palestino, que dejó más de un millar de muertos. Ocho meses después de aquel fatídico día, los cuatro han sido rescatados en el mismo sitio, el campo de refugiados de Nuseirat, en medio de una operación que ha provocado la muerte de más de 200 personas. Las fotografías de estas cuatro personas se han compartido por las redes y han formado parte de carteles que denunciaban los desaparecidos en los últimos meses, pero ¿cuáles son sus historias?
Noa Argamani, 26 años
De los cuatro rescatados de este sábado, Noa Argamani probablemente es la más conocida, ya que el momento en que fue secuestrada del Nova Festival en una moto se hizo viral, y así se convirtió en una de las imágenes de los centenares de secuestrados. En el vídeo viral, la joven gritaba desesperada y alargaba los brazos hacia su pareja, Avinatan Or, que continúa secuestrado en Gaza. Además, la madre de esta joven, de 26 años, sufre un cáncer terminal, y en varias ocasiones había reclamado al gobierno israelí poder ver su hija antes de morir. Se sabía que Argamani estaba viva porque a lo largo de estos meses ha aparecido en vídeos de propaganda de Hamás, el último publicado la semana pasada. La voz en off de Argamani instaba a la ciudadanía israelí a "salir a la calle a manifestarse" para presionar el gobierno de Netanyahu y hacer posible el retorno de los rehenes. "No queremos morir", decía.
📢 Additional details about Noa Argamani's captivity in Gaza and her initial debriefing:
— Israel News Pulse (@israelnewspulse) June 8, 2024
Noa was held hostage by a wealthy Gazan family, not by terrorists.
The family was very wealthy.
She was relatively well-fed.
They took her out of the house several times, disguised as an… pic.twitter.com/QiCUSCIB2c
Este sábado finalmente se ha podido reencontrar con sus padres. Las autoridades israelíes han informado de que se encuentra en buenas condiciones de salud, y la joven ha afirmado que está "feliz" y "emocionada" de poder "volver a hablar en hebreo" después de muchos meses. Su padre ha agradecido el esfuerzo al ejército y ha reclamado devolver al resto de rehenes en casa.
Almog Meir Jan, 21 años
Meir Jan pudo informar a sus padres el mismo 7 de octubre de que había un ataque en el Nova Festival, aunque no entendía muy bien qué estaba sucediendo. Les prometió que los volvería a llamar, pero no lo pudo hacer. La familia sí que supo, a través de los padres de un amigo que había asistido al festival con él, que consiguieron subir al coche, pero que cuando intentaban marcharse, les dispararon y no pudieron continuar. Unos días después, Hamás publicó un vídeo donde aparecían varios rehenes con las manos atadas, entre los cuales identificaron a Meir Jan. Desde entonces, sin embargo, no volvieron a tener noticias suyas, hasta este sábado, cuando finalmente se ha reunido con él. Meir Jan ha explicado que ha pasado los ocho meses cautivo con Kozlov y Ziv en cuatro casas diferentes, según ha informado Channel 12, y ha explicado que Hamás lo grabó para hacer un vídeo propagandístico, pero nunca se llegó a publicar.
Andrey Kozlov, 27 años
Kozlov es un inmigrante ruso-israelí, que en el momento del secuestro hacía un año y medio que vivía en Israel. A diferencia de los anteriores rehenes, no estaba en el festival de música como participante, sino que trabajaba como guardia de seguridad. Vivía a las afueras de Tel-Aviv con amigos, ya que no tenía ningún familiar en Israel. Su madre, sin embargo, se trasladó al país para seguir de cerca la evolución de los rehenes y estar presente en caso de que fuera liberado, como ha sucedido este sábado. A lo largo de estos meses, no han tenido noticias sobre su estado, y de hecho, no fue hasta tres semanas después del 7 de octubre que Israel confirmó que Kozlov era uno de los secuestrados.
Shlomi Ziv, 41 años
Ziv también trabajaba en el equipo de seguridad del festival, y había asistido con la prima de su mujer y un amigo de la familia, que fueron asesinados en la masacre cuando intentaban huir. Ziv pudo comunicarse con sus hermanas poco después del inicio del ataque, y les dijo que había un gran atasco de coches que intentaban salir del festival. Prometió que volvería a llamarlas mientras se le oía correr y jadear, pero no lo hizo. Inicialmente, fue considerado un desaparecido, ya que no había pruebas que hubiera sido trasladado a la Franja de Gaza. Tuvieron que pasar varias semanas hasta que las autoridades israelíes confirmaran que era uno de los rehenes.
