Los rebeldes islamistas habrían llegado a los suburbios de Damasco este sábado en el marco de una ofensiva contra el ejército del presidente sirio, Bashar al-Assad, que hace diez días que avanza de manera inexorable desde el noroeste del país. El líder de la alianza de yihadistas Hayat Tahrir al-Sham, ha informado que sus fuerzas "han empezado a poner en marcha la etapa final del asedio a la capital". Hace unas horas, los grupos opositores habían tomado el control de toda la provincia de Daraa, en la frontera con Jordania, cuna de la revuelta del 2011 contra Al-Assad. La caída de Damasco supondría la pérdida del último gran bastión del gobierno sirio que, ni siquiera con la ayuda externa de Rusia, ha podido frenar la retirada de sus tropas de varias ciudades estratégicas del país.
#Syria: rebel forces on the move to the capital #Damascus to topple the #Assad regime. pic.twitter.com/yQTjQkHRox
— Thomas van Linge (@ThomasVLinge) December 7, 2024
El ejército ha desmentido que sus fuerzas se estén replegando de las zonas más próximas a la capital y habla de una "falsa campaña mediática". El gobierno también indicó como falsas las informaciones previas sobre su retirada de Alepo y Hama, aunque al final sí que se produjo la entrada de yihadistas. Asimismo, el ministerio de Defensa ha desmentido informaciones que apuntaban a la posible deserción en massa de sus tropas en el sur del país hacia Iraq, a través del cruce de Al-Qaim.
"Nuestras fuerzas en la región meridional están llevando a cabo un despliegue de acuerdo con planes y órdenes militares", un eufemismo que el ejército utiliza desde el comienzo de esta campaña, cada vez que se retira de alguna posición en disputa. "Todos estos movimientos son normales, los círculos enemigos están intentando manipular la información para difundir rumores entre los ciudadanos", ha añadido el Ministerio en su página de Facebook. Por su parte, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos asegura en su última evaluación que los rebeldes ya se sitúan a diez kilómetros de Damasco y que las fuerzas de oposición en la provincia de Deraa, en el sur, también se están acercando a la capital.
¿Al-Assad, en el exilio?
En medio de esta situación, la Presidencia siria ha salido al paso de los rumores que apuntaban a la salida de Al-Assad del país. El Wall Street Journal, citando fuentes locales, ha informado este viernes de que Jordania y Egipto habían instado al presidente a abandonar Siria para formar "un gobierno en el exilio" ante el avance de los rebeldes, información poco después desmentida por las autoridades gubernamentales. "Algunos medios extranjeros publican rumores y noticias falsas sobre la salida del presidente de Damasco o sobre visitas relámpago a un país u otro. La Presidencia de la República Árabe de Siria niega todos estos rumores", ha hecho saber la oficina de Al-Assad en un comunicado publicado por la agencia oficial de noticias SANA.
Hoy por hoy, los combates han provocado más de 700 muertos, según el observatorio, de los cuales 110 son civiles. El presidente Al-Assad, vive su mayor reto en años, desde que los rebeldes islamistas han iniciado una gran ofensiva que ha supuesto una escalada de la guerra civil activa desde el 2011.