Millones de personas sienten los efectos del virus del dengue este 2024, mientras el mundo se enfrenta al brote mayor de su historia. Los casos alcanzaron la cifra más alta registrada en el 2023, con 6,5 millones de casos notificados a escala mundial, y es probable que en el 2024 esta cifra se duplique, con 12,4 millones de casos hasta ahora. Los mosquitos que propagan el virus se están beneficiando de la urbanización creciente y de los cambios en el clima y la temperatura. Al mismo tiempo, las altas tasas de obesidad y otras enfermedades crónicas están haciendo que las personas sean más vulnerables, afirman a los científicos.

El dengue también se conoce como "fiebre rompe huesos". La Organización Mundial de la Salud estima que 4.000 millones de personas corren el riesgo de contraer dengue y virus relacionados, cifra que aumentará a 5.000 millones en el 2050. La rápida propagación en los últimos años es "una tendencia alarmante", había destacado afirma el director general de la OMS, Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus.

El 3 de octubre, lanzó una estrategia global para combatir el aumento del dengue y otras enfermedades transmitidas por los mismos mosquitos, como el zika y el chikungunya. Las acciones del plan, que abarcan desde la vigilancia hasta los esfuerzos de control de los mosquitos, requerirán 55 millones de dólares (51 millones de euros) durante el próximo año, recuerda el The Guardian.

¿Dónde se detectan más casos de dengue?

La mayoría de los casos de dengue de este año y del año pasado se han registrado en la América Latina, aunque también se han registrado cifras elevadas a algunas partes de África y el sureste asiático. Pero las infecciones están apareciendo en todo el mundo, incluso en Europa continental. El mundo se enfrenta a una combinación de factores que incluyen la crisis climática, el aumento de la migración y la urbanización, dice la profesora Sophie Yacoub, jefa del grupo de investigación del dengue a la unidad de investigación clínica de la Universidad de Oxford a Ciudad Lo Chi Minh, Vietnam.

La especie de mosquito, destaca la misma publicación, que suele transmitir el dengue, es el Aedes aegypti, sobre todo en el sureste asiático. Pero también hay un segundo tipo que puede transmitir el virus: el Aedes albopictus, el mosquito tigre. Podéis sobrevivir en un rango más amplio de temperaturas y se ha establecido en nuevas zonas. Está bien adaptado en los entornos urbanos y se puede reproducir en una pequeña cantidad de agua estancada. "Eso es lo que está provocando la transmisión local en Europa, por ejemplo, y también se está extendiendo a China y a los estados del sur de los Estados Unidos", dice Yacoub.

¿El cambio climático facilita la transmisión de enfermedades?

Los cambios en el clima no solo ayudan a los mosquitos a sobrevivir en nuevas áreas, sino que también pueden causar fenómenos meteorológicos extremos, como inundaciones, que crean nuevos sitios de reproducción. Las olas de calor pueden acelerar los ciclos de reproducción. El doctor Najmul Haider, profesor de epidemiología en la Universidad de Keele, publicó en septiembre un artículo en la revista IJID Regiones, una publicación oficial de la Sociedad Internacional de Enfermedades Infecciosas, en las que destacaba el aumento de casos. Quería, dice y recoge el The Guardian, "dar el aviso de alarma que se trata de una cifra alarmante y que aumenta".

También es probable, dice, que se trate de una subestimación: "Recordad, la mayoría de los casos de dengue son asintomáticos o muy leves, no llegan al sistema de salud, no se diagnostican, y por eso pasan desapercibidos".