ÚLTIMA HORA | Sigue el minuto a minuto del conflicto Rusia - Ucrania
El servicio de inteligencia del ministerio de Defensa británico ha reportado que se están produciendo protestas ucranianas en las localidades de Kherson, Melitópol y Berdiansk, ahora ocupadas por el ejército ruso. A consecuencia de este clima de revuelta, el ejército ruso ha practicado 400 detenciones en la primera de estas localidades. Según el ministerio británico, el ejército ruso se está dedicando a rodear localidades ucranianas, a lo que dedica ahora más efectivos. "A causa de la fuerte resistencia ucraniana, las fuerzas rusas están comprometiendo un mayor número de sus fuerzas desplegadas en el país, para rodear ciudades clave", apunta. "Eso reducirá el número de fuerzas disponibles para continuar su avance y frenará todavía más el progreso ruso", prevén los británicos.
En Kherson, en el sur del país, el ejército ruso se han encontrado con personas que ondean la bandera de Ucrania y piden a los soldados que vuelvan a su casa. Hay personas que se plantan ante los tanques y blindados, y los obligan a detenerse. Los manifestantes se niegan a moverse, incluso después de que los soldados hayan disparado tiros de advertencia. El alcalde ha dejado claro que seguirán las órdenes de Kíiv, y no las de los ocupantes. Entre los gritos que se han escuchado, algunos hacían referencias a que están matando a mujeres y a niños desarmados, y también otros como "esclavos de Putin", "fascistas", "carne de cañón" y "asesinos de niños". Escenas similares se han vivido en Melitópol, en el sureste, y Berdiansk, en el mar de Azov, como muestran los vídeos.
Mientras tanto, la presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha enviado una carta a su homólogo ucraniano, Ruslan Stefanchuk, para trasladarle el apoyo del pueblo catalán a raíz de la agresión de Vladímir Putin: "Os escribo en nombre del Parlament de Catalunya para haceros llegar la solidaridad del pueblo catalán. Consideramos del todo inaceptable el intento de ocupación de vuestro país por parte del ejército ruso", empieza el escrito, que Borràs ha enviado en lengua catalana pero también en ucraniano. Borràs le traslada en la carta que muchos ciudadanos y organizaciones catalanas están tejiendo una red de solidaridad para ayudar a los refugiados y las víctimas de la guerra, una solidaridad que relata que no es nueva y que recuerda la situación vivida después de la catástrofe de la central nuclear de Chernobil: "Ahora aquellos lazos de solidaridad se fortalecen y nos mueven a haceros saber que hoy tampoco estáis solos", proclama la presidenta. Borràs añade que desde el Parlament defienden y defenderán siempre que todos los conflictos, también los territoriales, se puedan resolver "pacíficamente a través del diálogo y la negociación", y es por este motivo que le traslada la voluntad que se detenga la guerra: "Pedimos a la Unión Europea que os apoye para detener la agresión de que sois víctimas".