ÚLTIMA HORA | Sigue el minuto a minuto del conflicto Rusia - Ucrania
El gobierno ruso, encabezado por Vladímir Putin, ha vuelto a anunciar la apertura de corredores humanitarios en diferentes ciudades de Ucrania (Kyiv, Mariúpol, Járkov y Sumy) a partir de hoy a las 10:00 h, las 8:00 hora de aquí. Así lo han informado las fuerzas armadas rusas en la Cruz Roja, l'OSCE y la ONU. "Ante la catastrófica situación humanitaria y su agravamiento en las ciudades de Kyiv, Mariúpol, Járkov Sumy, las Fuerzas Armadas con fines humanitarios a partir de las 10:00 horas anuncian un 'régimen de silencio' y abren corredores humanitarios", se puede leer en el comunicado. Con todo, la viceprimera ministra ucraniana, Irina Veresxuk, ha recordado que Rusia ya ha incumplido dos veces el acuerdo para evacuar civiles de zonas de riesgo. Ahora, "quieren que nuestros ciudadanos se vayan a Rusia", ha denunciado en un mensaje en redes.
Esta denuncia de Veresxuk se ve reflelejada en las rutas que había planteado el gobierno ruso. En principio, el corredor que se abrirá en Kyiv pasará por las ciudades de Gostomel hasta llegar a Chernóbil y a las ciudades bielorrusas de Gden y Gomel, y posteriormente se entregará los desplazados por vía aérea a la Federación Rusa. Por otra parte, desde Mariúpol la salida se efectuará por dos vías diferentes. La primera ruta es desde esta ciudad hasta Rostov del Don (Rusia), para después llegar en transporte aéreo, ferroviario y por carretera a diferentes destinos seleccionados o puntos de alojamiento temporal. La segunda, desde Mariúpol hasta Mangush, en la cuenca de Donetsk. Por lo que respeta a la ruta de Járkov llegaría hasta la ciudad rusa de Bélgorod y desde Sumy saldrían dos rutas: una primera también hasta Bélgorod y la segunda hasta Poltava.
Para el gobierno ucraniano, esta propuesta es "absurda, cínica e inaceptable", motivo por el cual han instado a los ciudadanos a atender únicamente la información que publiquen las autoridades de Ucrania a través de los canales oficiales. Desde el ministerio de defensa ruso han reconocido que algunos de estos corredores incluyen la evacuación de civiles hacia Rusia, pero han exigido a Ucrania que "cumpla de manera estricta todas las condiciones para crear corredores humanitarios en las zonas enumeradas y garantizar la retirada organizada de civiles y extranjeros".
Fracasos anteriores
Hay que tener en cuenta que el gobierno de Putin ya ha anunciado corredores humanitarios en otros momentos de la guerra, pero estos nunca se han acabado convirtiendo en una realidad. El sábado, por ejemplo, prometió que abriría en las ciudades de Mariúpol y Volnovaja, en el este de Ucrania, para poder evacuar la población civil. Dos días antes, en las reuniones entre el gobierno ruso y el ucraniano, el único acuerdo al cual se llegó fue el establecimiento de estas rutas para proteger la población en un alto el fuego temporal.
Situación en Mariúpol
Ayer domingo, estos corredores que tenían que servir para evacuar a los civiles atrapados, especialmente mujeres y niños, resultaron ser un fracaso y el gobierno ucraniano ha culpado a los rusos de "romperlos una y una vez" aparte de imposibilitar la huida de cualquiera desplazado. Los bombardeos no han cesado en Mariúpol, una de las dos ciudades que en principio tenía que contar con un corredor humanitario, impidiendo así la evacuación de miles de personas. "Ya que la parte rusa no respeta la tregua y continúan los bombardeos en Mariúpol como las ciudades de los alrededores, por motivos de seguridad, se aplaza la evacuación", notificó ayer el Ayuntamiento del municipio a través de Telegram, mientras pedían a sus habitantes que se fueran de los lugares de concentración y recogida y volvieran a los refugios.
El sábado, el alcalde de esta ciudad portuaria de unos 450.000 habitantes, lamentaba que Mariúpol estaba sometida a un bloqueo, sin electricidad, agua, gas ni transporte, mientras el ejército ruso anunciaba que la habían asediado. Ante esta situación, los vecinos han empezado a recoger la nieve de las calles para convertirla en agua y beber de ella. La calefacción ha dejado de funcionar y las únicas opciones que tienen son esconderse en los sótanos y racionar la poca comida que les queda.