Rusia podría disparar contra sus propios soldados. Parece difícil de creer, pero eso es lo que constata el Ministerio de Defensa del Reino Unido. A causa de la baja moral y la renuncia a luchar, el Kremlin podría haber desplegado unidades que se dediquen a amenazar con disparar a sus propios soldados en retirada, según constata.
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Un informe de inteligencia publicado este viernes ha descrito a estas unidades como tropas de barrera o unidades de bloqueo, utilizadas para imponer las ofensivas. El informe dice: "Recientemente, los generales rusos probablemente querían que sus comandantes utilizaran armas contra los desertores, incluyendo la posibilidad de usar armas contra estos desertores después de haber dado una advertencia. Los generales probablemente también querían mantener posiciones defensivas hasta la muerte. La táctica de disparar a los desertores probablemente testifica la baja calidad, la baja moral y la indisciplina de las fuerzas rusas".
Latest Defence Intelligence update on the situation in Ukraine - 04 November 2022
— Ministry of Defence �������� (@DefenceHQ) November 4, 2022
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¿Rusia se retira de Jersón?
En la región de Jersón, un oficial de las tropas rusas ha expuesto que muy posiblemente Moscú retirará a las tropas. Eso constataría una gran retirada que, si se confirma, sería un importante punto de inflexión. "Lo más probable es que nuestros soldados se vayan al otro lado", destaca Kirill Stremousov, al administrador civil instalado por Rusia. Anteriormente, Rusia había negado que sus fuerzas estuvieran pensando en una retirada.
Ucrania, por ahora, no las tiene todas. Piensa que, esta posible retirada, quizás sería una trampa y ya ha constatado que sus fuerzas seguirían luchando en la zona.
Más de 4 millones de ucranianos sin electricidad
En este contexto, los cortes no se detienen. Los ataques rusos de las últimas semanas contra infraestructura eléctrica y agua de Ucrania han golpeado duramente a los civiles a medida que se acerca el invierno. Hasta el jueves por la noche, 4,5 millones de ucranianos en la capital, Kyiv, y otras 10 regiones estaban temporalmente sin electricidad, los últimos cortes causados por ataques rusos, según ha dicho el mismo presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
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Los ataques rusos contra el sector energético y las instalaciones energéticas de Ucrania "no se detienen ni un solo día", ha dicho Zelenski. "Hay daños en las instalaciones de energía en diferentes áreas del país: este es el volumen de generación y transporte de electricidad para millones de personas. Cerca de 4,5 millones de consumidores han sido desconectados temporalmente del consumo bajo los horarios de emergencia y de estabilización".
De esta manera, el mandatario ucraniano ha puesto de manifiesto una nueva misión para Ucrania: "aguantar el terror energético". Zelenski ha destacado que es la "tarea nacional" del país. "El mismo hecho de que Rusia haya recurrido al terror contra la industria energética muestra la debilidad del enemigo. No pueden derrotar a Ucrania en el campo de batalla, y es por eso que están tratando de romper nuestro pueblo de esta manera: humillar a los ucranianos, atacar la moral de nuestro pueblo, la resistencia de nuestro pueblo. Creo que Rusia no tendrá éxito". Se espera un invierno duro y largo en Ucrania y ahora ya faltan solo unas semanas para empezar esta estación.