Ha sido este martes cuando hemos sabido que la Unión Europea recomendará a los ciudadanos tener provisiones por si hay una guerra o una crisis climática. Concretamente, la Comisión Europea presentará este miércoles su estrategia de preparación ante grandes crisis y amenazas —que pueden ir de un accidente nuclear a una guerra, ataques a infraestructuras críticas o pandemias, entre otros—. La vicepresidenta de la CE de Derechos y Habilidades Sociales, Trabajos de Calidad y Preparación, la socialdemócrata rumana Roxana Mînzatu, y la comisaria europea de Preparación y Gestión de Crisis e Igualdad, la socialdemócrata belga Hadja Lahbib, informarán en rueda de prensa sobre la estrategia, una vez aprobada por el colegio de comisarios del bloque comunitario. Ahora bien, ¿qué sabemos del kit de supervivencia que la UE recomienda en caso de emergencia?
Vamos por partes. El objetivo de la estrategia que se presentará este miércoles es que la UE esté preparada para dar apoyo a los estados miembros en casos de crisis grave, desde accidentes a gran escala hasta energía nuclear, catástrofes naturales, actos de terrorismo e, incluso, guerras. Se trata de anticiparse y reaccionar con rapidez, así como de tener en cuenta la experiencia que los estados miembro han adquirido en sectores determinados. Si bien las autoridades nacionales, regionales y locales siguen siendo las principales responsables para responder ante las crisis, Lahbib ha dicho este martes desde Amberes (Bélgica) que los estados miembro “ya no pueden hacer frente solamente a sucesos como grandes inundaciones, incendios forestales o ataques híbridos”. “La UE quiere estudiar cómo puede aportar valor añadido, ayudando a mejorar la coordinación y el intercambio de información, por ejemplo,” ha explicado la comisaria.
Recursos para subsistir 72 horas
A finales del año pasado, el expresidente finlandés Sauli Niinistö acabó de elaborar un informe sobre cómo reforzar la disposición civil y militar de la UE. Aquel informe ya ponía el acento en la importancia de que los ciudadanos estuvieran preparados ante amenazas, y ahora Bruselas ha decidido incluir en la estrategia que todos los hogares tengan reservas de agua, medicamentos, baterías y alimentos para subsistir 72 horas sin ayuda externa en caso de crisis. Según un borrador del texto al cual ha tenido acceso El País, se remarca que “en un contexto de aumento de los riesgos naturales y antropogénicos, y de deterioro de las perspectivas de seguridad para Europa —en referencia a la amenaza rusa, principalmente—, es urgente que la UE y los estados miembros refuercen su preparación”.
Varios países europeos ya habían tomado decisiones en esta línea durante los últimos meses. Es el caso de las guías que los países nórdicos han publicado de cara a una posible escalada militar. Finlandia lanzó un sitio web sobre “Preparación para emergencias y crisis”, que recoge cómo de clave es que todos los hogares cuenten con suficientes reservas de productos esenciales para subsistir al menos tres días —como agua, alimentos no caducos, medicinas y dinero en efectivo—. Por su parte, Suecia actualizó el folletón “En caso de crisis o de guerra”, entre otros.

El kit de supervivencia de Francia
El último caso ha sido el de Francia, donde se ha preparado un manual de supervivencia que se enviará a todos los hogares franceses en verano, según ha adelantado recientemente la cadena Europe 1. Tiene una veintena de páginas, que se dividen en tres partes. La primera se titula “protegiéndose”, con consejos prácticos y un kit de supervivencia con imágenes que hace tiempo que fomenta el gobierno francés. Se incluyen seis litros de agua embotellada, una decena de latas de comer, disponer de pilas y de una linterna, así como paracetamol, compresas y suero fisiológico, entre otros.
La segunda parte se llama “¿Qué hay que hacer en caso de alerta?”, y recoge números de emergencia, así como el procedimiento a seguir en función del tipo de crisis en curso. “Implicaos” es la tercera parte, que pretende que la gente forme parte de la respuesta a la posible crisis. Cuando Europe 1 se hizo eco de la noticia, se estudiaban dos posibles títulos: había una opción más neutra y educativa, “Manual de instrucción de crisis”, pero también estaba sobre la mesa la posibilidad de un título más movilizador y aglutinador.
