El canciller de Alemania, Olaf Scholz, y el presidente de Francia, Emmanuel Macron, han hecho un llamamiento a reivindicar la fortaleza europea ante el nuevo panorama internacional que se abre con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. La reivindicación de las dos principales potencias de la Unión Europea surge ante las amenazas del republicano de imponer aranceles más duros a las importaciones y por la presión sobre sus socios transatlánticos para que aumenten, por ejemplo, el gasto defensa. "Europa no se doblará ni se esconderá, sino que será un socio constructivo y seguro de sí mismo", ha asegurado el máximo mandatario alemán en una visita a París. Scholz ha reconocido que el mandato de Trump supondrá un "desafío" a la estabilidad de las relaciones, en un mundo que "está, por decirlo suavemente, en movimiento."
Macron ha coincidido en que Europa tiene que defender sus intereses y asumir sus propias responsabilidades. El presidente francés ha dicho que, en este momento de incertidumbre, "nos corresponde a los europeos, y por lo tanto a nuestros dos países, ejercer plenamente nuestro papel para garantizar una Europa unida, fuerte y soberana". Macron ha declarado que para llevar a cabo esta tarea, es necesario aumentar el gasto en defensa.
La reivindicación de los dos mandatarios se ha producido en el marco del 62.º aniversario del Tratado del Elíseo, piedra angular de las relaciones entre Berlín y París. En este sentido, Macron ha reivindicado la "sólida" alianza entre ambos países y ha hecho un llamamiento al aumento de la cooperación en diferentes ámbitos para mejorar el desarrollo de la UE. Por su parte, Scholz también ha hecho declaraciones en el marco económico. El canciller alemán ha abogado por una cumbre europea para proteger la industria siderúrgica e impulsar la reducción de la burocracia en el continente. Asimismo, también ha denunciado las multas a las empresas automovilísticas que han invertido en movilidad eléctrica, pero todavía no venden bastantes vehículos de este tipo.
No es la primera vez que Alemania y Francia responden a las amenazas que Trump supone para la Unión Europea. El 8 de enero ya advirtieron al republicano que no intimidara con el uso de la fuerza para tomar el control de Groenlandia, territorio autónomo de Dinamarca. Scholz dijo que "el principio de la inviolabilidad de las fronteras se aplica a todos los países", sin importar si está "en el este o el oeste". Además, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noël Barrot, instó a sus socios europeos a "despertarnos, aumentar nuestra fuerza". En este sentido, la UE nunca "permitiría que otras naciones del mundo atacaran sus fronteras soberanas", declaró.