La rebelión del grupo Wagner este sábado sorprendió a todo el mundo, incluso, a los expertos en Rusia de todo el planeta, que durante el fin de semana han trabajado para intentar encontrar respuestas a la columna de tanques y carros de combate que se dirigían hacia Moscú, y que finalmente, se acabaron retirando cuando les quedaba poco más de 200 kilómetros para llegar a la capital rusa. A pesar de la sorpresa de las fuerzas rusas, la operación militar liderada por Yevgueni Prigozhin no sorprendió a los servicios de Inteligencia de los Estados Unidos. Según apunta The Washington Post, el espionaje de Washington era conocedor desde mediados del mes de junio de los planes del grupo Wagner contra Putin. Los expertos detectaron las intenciones de Prigozhin de impulsar una acción armada contra el Ministerio de Defensa ruso. La inteligencia estadounidense decidió no difundir esta información para evitar las acusaciones de Putin de golpe de estado.
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Los servicios de inteligencia informaron tanto en la Casa Blanca como las agencias del gobierno estadounidense con el fin de estar alertas sobre los pasos del grupo Wagner. Mientras que la CNN, apunta que observando el material militar que las tropas de los mercenarios iban acumulando cerca de la frontera con Rusia, se interpretaba como una maniobra de ataque por parte de los mercenarios de Prigozhin. Los Estados Unidos sabían esta información, aunque no sabían cuándo se produciría el ataque, que se acabó precipitando el viernes, después de perder el control de una ciudad rusa.
Humillación de Vladímir Putin
El secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, afirmó este domingo que lo que ha pasado en las últimas horas en Rusia representa una oportunidad para Ucrania y su contraofensiva. "En la medida en que Rusia ahora está distraída, que Putin tiene que preocuparse por lo que sucede dentro de Rusia, tanto como tiene que preocuparse para lo que está tratando de hacer, sin éxito, en Ucrania, creo que eso crea una ventaja adicional para los ucranianos", apuntó en una entrevista con la CNN. Así, el hecho de que Putin tenga "desde dentro, a alguien que cuestione directamente" su autoridad y "las premisas sobre las cuales lanzó esta agresión contra Ucrania", eso, "en sí mismo, es una cosa muy poderosa".
Por su parte, Ucrania considera que la rebelión de los mercenarios del Grupo Wagner en Rusia y su posible desaparición como a fuerza de asalto a Ucrania generan nuevas posibilidades para Kyiv, que ve el conato de motín como una "humillación" para el presidente Vladímir Putin, todo y que sin efectos todavía en el frente. Desde el entorno del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, se lanzaron este domingo sucesivas interpretaciones sobre el presunto caos que rodearon las 24 horas de rebelión del jefe de los Wagner, a pesar de su posterior retirada por mediación de Bielorrusia. El intento de motín refleja el inicio del "desmantelamiento del sistema" de Putin, según afirmó el secretario del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania, Oleksi Danílov, a través de su cuenta de Twitter.
Visita a las tropas rusas
El ministro de Defensa de Rusia, Serguei Shoigú, ha hecho este lunes a la primera visita al sitio de mando avanzado de las tropas rusas que combaten en Ucrania, lo que ha supuesto su primera aparición pública después de la rebelión del grupo Wagner. Durante su visita al Grupo de Fuerzas Occidental, "ha constatado el alta eficiencia en la identificación y destrucción de equipos militares y puntos de despliegue del enemigo en las áreas tácticas de la zona de responsabilidad del grupo", ha señalado el Ministerio de Defensa en un comunicado en su canal de Telegram.
Defensa ha señalado que el ministro ha escuchado un informe del comandante del grupo, coronel general Yevgeni Nikíforov, "sobre la situación actual, la naturaleza de las acciones del enemigo y el cumplimiento de las misiones de combate por tropas rusas en las principales direcciones tácticas", así como sobre los regimientos de reserva recientemente formados.
El que todavía no ha aparecido desde el sábado ha sido el presidente ruso, Vladímir Putin, que nadie sabe donde está. Este domingo el Kremlin publicó una entrevista grabada el miércoles anterior, donde el presidente ruso reafirmaba su determinación de continuar la guerra en Ucrania, a pesar de haberse enfrentado a "desafíos inesperados", haciendo referencia al alzamiento del grupo Wagner este sábado.