El 'sí' a la ampliación de competencias y del poder del presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, se está imponiendo de manera provisional en el referéndum que ha tenido lugar este domingo en todo el país. Con el 95% del escrutinio, los votos favorables a la reforma constitucional propuesta por Erdogan representan el 51,41% del total y los contrarios se quedan 3 puntos porcentuales por detrás, con el 48,59%.
Desde el inicio del recuento, los datos han ido oscilando, pero en todo momento la opción defendida por Erdogan se ha mantenido por delante. Así, con casi la totalidad del escrutinio, todo hace pensar que la victoria del actual presidente ya está casi encauzada.
Según los primeros datos facilitados por la cadena NTV, la participación habría llegado al 84% del censo. Los colegios electorales han cerrado a las cuatro de la tarde. Antes del referéndum, las encuestas mostraban una resultado ajustado entre los partidos de la reforma y los que no quieren darle todo el poder a Erdogan.
Sospechas de corrupción desde la oposición
El Partido Republicano del Pueblo (CHP), actualmente en la oposición, ha cuestionado la legitimidad del recuento de votos a raíz de la decisión tomada por la Comisión Superior Electoral de aceptar votos sin el sello pertinente. "La YSK -la comisión- ha fracasado al permitir el fraude en el referéndum", ha criticado Bulent Tezcan, vicepresidente del CHP.
La sospecha de juego sucio en la votación y el recuento posterior se ha cernido sobre los colegios electorales a lo largo de todo el día. Desde varios sectores se ha denunciado que partidarios del partido gubernamental han acompañado –y presionado- a otras personas a votar para asegurar el apoyo al 'sí'.