Los independentistas del SNP, el partido de Nicola Sturgeon, se han disparado en el laborioso recuento electoral, después de las elecciones del jueves. Cuando ya se han otorgado cerca de 50 escaños (la mayoría está situada en 65), el SNP consigue 43, los Liberal Demócratas 4, el Partido Conservador 3, y el Partido Laborista 2.
La formación independentista ha conseguido 3 escaños clave, uno que antes ostentaban los laboristas y dos que tenían los conservadores. En el resto ya había ganado en anteriores comicios. Este hecho es trascendental para llegar a la mayoría absoluta. Según observadores que cita la BBC, si el SNP consigue ganar 3 plazas más a la oposición unionista, ya tendrá al alcance la mayoría absoluta, siempre que repita en todos sus sitios tradicionales.
Un hecho destacado es que el SNP ha conseguido el escaño que tenía la exlíder de los conservadores escoceses, Ruth Davidson, en el distrito de Edimburg Central.
Nicola Sturgeon ha ganado fácilmente el enfrentamiento con el líder laborista escocés, Anas Sarwar, en el distrito electoral de Glasgow Southside, y se ha quedado su plaza. Sturgeon ha ganado por 9.456 votos, y ha quedado sólo marginalmente por debajo de los 9.593 que consiguió en el 2016.
De los 129 escaños, 73 -escogidos por mayoría-, simplemente corresponden a las circunscripciones, mientras que los otros 56 - por el sistema proporcional- proceden de la votación a listas. Se espera que la mayoría de los 73 escaños de las circunscripciones se conozcan este viernes, pero habrá que esperar al sábado para tener los resultados de las listas.
Los resultados son seguidos con atención por el Ejecutivo británico de Boris Johnson a raíz de la promesa electoral de la líder del SNP de celebrar un nuevo referéndum sobre la independencia, cuando Escocia supere la crisis de la Covid-19.
Escocia está dividida en ocho regiones - Central Scotland, Glasgow, Highlands & Islands, Lothian, Mid-Scotland & Fife, Norte East Scotland, South Scotland i West Scotland- y cada una aporta siete escaños al Parlamento de Edimburgo.
A diferencia de otras votaciones, en esta ocasión no hubo encuestas a pie de urna al final de la votación anoche, ni predicciones por parte de las diferentes formaciones políticas. 4 millones de personas tenían derecho al voto en las elecciones escocesas.
Las elecciones de Escocia se han convertido en un paso clave para que el independentismo consiga el segundo referéndum sobre la independencia. Lo más importante de los comicios no es saber quién ganará o si el Partido Nacional Escocés (SNP) podrá formar gobierno, sino qué apoyo tendrá —junto con el resto de formaciones independentistas, si hay— para presionar a Downing Street para celebrar el segundo referéndum de independencia.
La última encuesta realizada por el YouGov va a favor del partido que lidera Nicola Sturgeon, le da a unos siete diputados más de los que tiene actualmente. Es decir, el SNP pasaría de los 63 (actualmente tienen dos menos) a los 70 escaños, y conseguiría la mayoría absoluta en el Parlamento de Holyrood, de manera que podría gobernar en solitario. Pero habrá que esperar al escrutinio.