Los primeros soldados norcoreanos ya han llegado al frente de la guerra a la región rusa de Kursk, fronteriza con Ucrania y donde las tropas ucranianas ocupan parte del territorio después de la incursión el agosto pasado, ha asegurado este jueves la inteligencia militar ucraniana, GUR. "Las primeras unidades del ejército de la República Popular Democrática de Corea, entrenadas en los campos de entrenamiento del este de Rusia, ya han llegado a la zona de combate de la guerra ruso-ucraniana. En concreto, el 23 de octubre se registró su aparición en la región rusa de Kursk", ha destacado el GUR en su canal de Telegram y recoge Efe.

Según la inteligencia militar de Ucrania, el número de soldados norcoreanos desplegados en Rusia es actualmente de unas 12.000, 500 de las cuales son oficiales, entre ellos tres generales. Estos soldados son entregados en cinco campos de entrenamiento militar situados en el este de Rusia y el responsable de supervisar el adiestramiento corresponde al viceministro ruso de Defensa Yunus-Bek Ievkurov.

Moscú dará 50 metros de papel higiénico a los soldados norcoreanos

"A los soldados enviados por Pyongyang se les proporciona munición, ropa de cama, ropa y calzado de invierno, así como artículos de higiene. En concreto, Moscú proporcionará mensualmente 50 metros de papel higiénico y 300 gramos de jabón a cada soldado norcoreano, según las normas establecidas", escribe el GUR y constata a misma agencia. La inteligencia militar ucraniana afirma que se destinan varias semanas a la coordinación del Ejército norcoreano, que Rusia pretende utilizar a la guerra contra Ucrania.

El Pentágono habría dicho este miércoles por primera vez tener constancia de la presencia de tropas norcoreanas en territorio ruso, a la vez que el Servicio Nacional de Inteligencia (NIS) surcoreano estimó en unos 3.000 el número de soldados enviados ya por Pyongyang a la Federación Rusa, donde estarían recibiendo instrucción para unirse a las tropas rusas que luchan en Ucrania.

La relación de amistad entre Vladímir Putin y Kim Jong-un

Rusia y Corea del Norte, las dos parias en Occidente, forjaron lazos cada vez más amistosos desde la invasión de Moscú. En junio, las dos naciones firmaron un pacto de defensa histórico y se comprometieron a utilizar todos los medios disponibles para proporcionar asistencia militar inmediata en caso de que la otra fuera atacada. Varios gobiernos acusaron a Pyongyang de suministrar armas en Moscú para su prolongada guerra en Ucrania, una acusación que los dos países negaron, a pesar de la evidencia significativa de estas transferencias.

Los envíos de armas, que incluyen miles de toneladas métricas de municiones, han ayudado a Rusia a reponer sus menguantes arsenales en una guerra en qué las fuerzas ucranianas hace mucho tiempo que están superadas en armamento y personal. Mientras tanto, se cree que Corea del Norte, con problemas de liquidez, recibió a cambio alimentos y otros artículos de primera necesidad.