Los bomberos de Los Ángeles avanzan poco a poco, pero de forma constante hacia el control de los fuegos. En las últimas horas, el número de víctimas mortales del fuego ha aumentado hasta 11. Sin embargo, las autoridades han advertido en varias ocasiones que cuando los fuegos estén extinguidos y los servicios de emergencia puedan acceder a las zonas afectadas, esta cifra aumentará. Por otra parte, en medio del caos provocado por los seis fuegos activos en la zona, el condado de Los Ángeles impone un toque de queda y se blinda para evitar los saqueos de los edificios que todavía están de pie.
🟡 ¿Por qué son tan graves los incendios en Los Ángeles?
Desde este mismo viernes, la ciudad de Altadena, donde hasta el momento han muerto seis personas, está bajo el control de soldados y otros oficiales de varias agencias de la ley local y estatal. Todo para evitar saqueos en la zona. El control es tan férreo que solo se permite la entrada a los bomberos, el personal que atiende la emergencia y los miembros de la prensa, según informa EFE. Incluso los residentes de la zona que fueron evacuados y han tratado de volver a acceder a la ciudad se han encontrado con el acceso restringido.
En Los Ángeles, al menos 600 soldados de la Guardia Nacional de California han sido desplegados para ayudar tanto a los bomberos como a la policía ante la emergencia de que suponen los seis fuegos todavía activos. Al menos 18 personas han sido arrestadas por saqueos en las áreas devastadas por los incendios, 15 fueron detenidos en el área del incendio Eaton.
Las llamas, cada vez más controladas
Cuatro días después de que empezaran los incendios más violentos de la historia reciente de Los Ángeles, algunos focos son controlados por los bomberos, sin embargo, todavía se está lejos de dar la crisis por acabada. Por ahora, se calcula que 12.000 estructuras han sido afectadas por el fuego, como estructura se incluyen casas, edificios de apartamentos, negocios, dependencias y vehículos. Hasta el momento, 150.000 personas han recibido la orden de evacuación de la zona.
El jefe de bomberos del condado de Los Ángeles, Anthony Marrone, ha dicho que los equipos "estaban en su mejor posición hasta ahora para controlar los incendios". El avance en el control de las llamas también es debido a la ayuda que ha llegado desde otros condados y estados vecinos como Arizona. Incluso México y Canadá han enviado equipos para ayudar al combate de las llamas. Pero todavía queda un largo camino por recorrer, especialmente en busca de víctimas mortales y atender a las personas que lo perdieron todo.