La guerra en Ucrania ha cambiado muchas cosas. Y de otros, que todavía están por cambiar. Finlandia y Suecia podrían solicitar ser miembros de la OTAN en los próximos días. De hecho, Finlandia ya ha anunciado su intención de unirse a la Alianza. El presidente de Finlandia, Sauli Niinistö, y la primera ministra, Sanna Marin, han dado luz verde al ingreso del país a la OTAN. Se trata de una decisión histórica que rompe más de ocho décadas siendo neutral. La decisión podría anunciarse oficialmente el domingo.

La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) es una alianza militar defensiva formada el año 1949 por 12 países, incluyendo los Estados Unidos, Reino Unido y Francia. El objetivo era garantizar la seguridad de los estados europeos ante la expansión rusa soviética. Su garantía de seguridad común se basa en el artículo 5 del tratado, que establece que un ataque a un miembro es un ataque a todos y compromete en los miembros a defenderse entre sí en caso de agresión. Actualmente, 30 países forman parte de la Alianza. Además, la OTAN mantiene acuerdos de asociación con unos 40 países que colaboran.

¿Por qué Finlandia y Suecia todavía no son miembros?

Los dos consideraron, a su momento, que unirse a la OTAN representaría una provocación para Moscú que era innecesaria. Por este motivo, durante mucho tiempo han seguido políticas de neutralidad, no alineación. En el caso de Finlandia, comparte con Rusia una frontera de 1.300 kilómetros. Declaró su independencia el año 1917, después de más de un siglo de gobierno de Moscú y su ejército luchó dos veces contra las fuerzas soviéticas durante la Segunda Guerra Mundial y perdió cerca del 10% de su territorio. Entonces, un acuerdo de amistad y cooperación mutua el año 1948 con Rusia aisló militarmente Finlandia de Europa, aunque después de la disolución de la Unión Soviética y la entrada en la UE han permitido salir de sombra rusa.

La negativa de Suecia de entrar en la OTAN parece más una cuestión ideológica. Su política exterior se ha centrado más en el diálogo multilateral y desarme nuclear. Y de hecho, ha actuado durante años como mediador. Además, también redujo parte de su ejército. Sin embargo, las cosas han cambiado un poco desde que Rusia se anexionó Crimea el año 2014, recuerda el The Guardian. Después de abolirlo, lo volvió a hacer obligatorio. Dura 11 meses e implica tanto a hombres como mujeres. La razón para volver a activarlo es que detectaron una falta de soldados. En Finlandia, el servicio militar también es obligatorio, aunque está la posibilidad de sustituirlo por servicios civiles. La duración varía entre los 6, 9 y 12 meses.

Manifestación en Alemania contra la guerra en Ucrania / Unsplash

¿Y ahora, qué pasa? ¿Por qué consideran unirse?

Sanna Marin y su homóloga sueca, Magdalena Andersson, dijeron el mes pasado que la invasión rusa en Ucrania "había cambiado el panorama de seguridad en Europa". De hecho, según recoge el mismo artículo del diario británico, los finlandeses y los suecos sienten cada vez más fuerte la creencia que al hecho de unirse a la OTAN les ayudaría a mantenerse seguro. Las encuestas dan apoyo a la incorporación en la Alianza. Un 75% en Finlandia y un 60% en Suecia, destaca el rotativo.

Ambos países son socios de la OTAN y ya participan en algunos ejercicios. Finlandia, según parece, ya cumple el objetivo de gasto en defensa de la OTAN, con el 2% del PIB. Y Suecia estaría cerca. El secretario de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha dicho que serían recibidos "con las manos abiertas".

¿Y Rusia qué dice?

Después del anuncio de este jueves por parte de Finlandia, Rusia ya ha reaccionado. Y es que ya ha advertido de "graves consecuencias militares y políticas" que obligarán a "tomar medidas de represalia" para "restaurar el equilibrio militar". Putin ve a la OTAN como una amenaza para la seguridad de Rusia. Y las amenazas ya han llegado. Moscú espera. Pero de momento ya ha hecho un comunicado donde describe el movimiento de Finlandia como un "cambio radical en la política exterior del país", según recoge la BBC. Y se puede leer que "la adhesión de Finlandia a la OTAN causará numerosos daños a las relaciones bilaterales y al mantenimiento de la estabilidad y seguridad". El Kremlin no ha especificado todavía cuáles serán estas medidas "técnico-militares" que ha mencionado.

Ucrania quiere entrar desde el 2008

En 2008, Víktor Yushchenko, presidente del país entonces, comenzó su proceso de adhesión al presentar una solicitud de ingreso. Pero todo cambió en el 2010. Con la llegada al poder de Víktor Yanukovich, las relaciones con Europa se enfriaron. Algo que no gustó mucho a los ucranianos, que comenzó el Maidan, posterior anexión de Crimea por parte de Rusia y la guerra del Donbás. En 2017, tal y como recuerda El Mundo, Ucrania aprobó una legislación en el Parlamento para reactivar el objetivo de entrada en la OTAN. Finalmente, Volodímir Zelenski, aprobó en 2020 una Estrategia de Seguridad Nacional con el objetivo de ingresar en la Alianza.

Pero volviendo a Finlandia y Suecia. Sobre la mesa no hay ninguna decisión formal (todavía). El presidente de Finlandia, el primer ministro y otros ministros del gobierno se reunirán para tomar una decisión final sobre la solicitud. Después, se presentaría una decisión al Parlamento para que lo acabaran aprobando de cara la semana que viene. Suecia acaba de debatir qué hace y según el mismo The Guardian parece que la decisión podría ser inminente. El lunes se podría acabar de cerrar la decisión. Para todo el resto, habrá que seguir esperando.

 

Imagen principal: unas balas sobre la bandera de la OTAN / Unsplash