Tailandia se ha convertido este martes en el tercer país de Asia y el primero del Sureste Asiático a legalizar el matrimonio igualitario, que podría entrar en vigor a finales de año después de superar una serie de trámites formales. La tercera y última lectura del proyecto de ley ha sido aprobada por el Senado con una abrumadora mayoría (130 votos a favor, 4 en contra y 18 abstenciones), cosa que se suma al gran apoyo que ya obtuvo en marzo en la Cámara de Representantes.
"La nueva ley de Matrimonio Igualitario de Tailandia es un triunfo para la justicia y los derechos humanos (...) El camino hasta este punto ha sido largo y lleno de desafíos, pero la votación de este martes para garantizar el matrimonio igualitario marca un momento histórico que merece celebración", ha destacado en un comunicado Mookdapa Yangyuenpradorn, activista de la ONG Fortify Rights.
Para celebrar esta histórica votación hay previstos este martes varios acontecimientos a lo largo de la ciudad, entre ellos un acto promovido por el primer ministro, Srettha Thavisin, –uno de los defensores del cambio– en la Casa del Gobierno, así como un desfile por algunas de las principales avenidas de Bangkok.
La ley la firmará el rey de Tailandia
Después de ser ratificada por las dos cámaras del Legislativo, la ley será enviada al gabinete de gobierno y posteriormente será firmada por el rey de Tailandia. La legislación entraría finalmente en vigor 120 días después de su publicación en la Gaceta Real. Plazos que, aproximadamente, pueden culminar hacia finales de octubre o noviembre.
Entre los cambios fundamentales que pretende introducir la ley hay la denominación del matrimonio entre "dos personas", en lugar de entre "un hombre y una mujer", y la modificación al estatus legal de "marido y mujer" a una "pareja casada" sin género.
Además, la nueva ley garantiza a las uniones LGTBI los mismos derechos de que disfrutan actualmente los heterosexuales, como derechos de herencia, desgravaciones fiscales y adopción de niños, entre otros.
Una vez entre en vigor, Tailandia será el tercer país asiático donde las parejas homosexuales puedan contraer matrimonio, después de Taiwán y Nepal, y el primero en el Sureste Asiático, una región donde los retrocesos de los derechos LGTBI son palpables en países como Indonesia, Malasia o Brunéi.
Aunque el país cuenta con una de las comunidades LGTBI mayores y visibles de toda Asia, los activistas hace años que critican que las conservadoras leyes tailandesas no reflejan los cambios y actitudes de la sociedad en las últimas décadas.