Rusia empezó una guerra con Ucrania el pasado 24 de febrero. Después de más de cuatro meses sufriendo las consecuencias de la invasión, el país se enfrenta a las dificultades en atender heridos por bombas y explosiones, desplazados internos y migrantes sin dejar de lado la salud mental. En este contexto, Médicos Sin Fronteras mujer apoyo a los médicos ucranianos, proporcionando suministros y formación, evacuando también heridos a la línea de frente. Así, han puesto también un tren medicalizado que ya habría ayudado a trasladar a 600 personas. De esta manera lo explicaba la delegada de Médicos Sin Fronteras a Catalunya, Milagros Font, en conversación con ElNacional.cat. "El sistema ucraniano es un buen sistema comparado con los otros que hemos trabajado, pero sí que se han encontrado con dificultades con respecto a suministros y medicamentos".

Otra tarea que se lleva a cabo desde la organización es asistir a personas que están con vulnerabilidad. "Hay seis millones de personas que han salido de Ucrania, pero unos siete millones son desplazados internos", constata. "Algunos tienen enfermedades crónicas y no pueden continuar con sus tratamientos". Finalmente, una de las otras tareas que se hacen es dando apoyo a la salud mental. "Trabajamos con el personal ucraniano y estamos organizando algunas formaciones concretas en este ámbito. Llegan muchos pacientes, gente que llega de una zona de bombardeo o que han pasado por una experiencia traumática". En este sentido, destaca que la psicología clínica es un aspecto mejorable en el país y "organizamos sesiones para hablar de qué pasa. Problemas de sueño, falta de hambre... son síntomas de que pasa algo".

Antes de la guerra, la organización llevaba a cabo programas contra la tuberculosis y el VIH. Pero desde el inicio del conflicto, se han llevado más de 485 toneladas médicas. "Hay específicos y otros que no lo su tanto. Nosotros hacemos trabajo con kits diseñados para dar apoyo a 50 operaciones y tienes todo lo que necesitas para estas operaciones". Font destaca que están desplazados por todo el territorio y hay negociaciones para poder entrar también en Mariúpol y en el Donbás.

Un tren medicalizado que recorre Ucrania

La red ferroviaria se está explotando en Ucrania. De esta manera ha sido una forma creativa de adaptarse a esta guerra. Algunos hospitales de las zonas más afectadas por el conflicto están saturados, y hay que trasladar a los pacientes en estado grave a otros centros para evitar la sobrecarga, pero también para poder ofrecerlos una atención y cuidados necesarios. Algunos bajan del tren en camilla, silla de ruedas o por su propio pie. Sin embargo, aparte de las heridas físicas, también hay las emocionales. Precisamente por eso, también hay cuidadores que tienen juguetes o peluches para los más pequeños.

Las estaciones, en este sentido, son sinónimo de cambio. En algunos casos, dejar la desesperación para llegar en un lugar donde, como mínimo, la situación sea un poco más estable. Los viajeros bajan con escasas pertenencias personales, cogidas rápidamente y transportadas con bolsas grandes de plástico o alguna mochila.

 

Imagen principal: los socorristas ucranianos llevan el cuerpo de una víctima después de un bombardeo en una zona residencial de Mykolaiv / Efe