Destrucción masiva de la infraestructura civil. Los residentes de Gaza han podido ver estos últimos días como los bombardeos han afectado edificios residenciales, hospitales y escuelas de todo el enclave. E Israel ha prometido más. Se ha comprometido, cabe recordar, al asedio total de Gaza. Los funcionarios de salud palestinos han dicho que más de 900 personas han muerto y 4.250 han resultado heridas desde el sábado. Unos datos que no paran de subir y donde las cifras se quedan desactualizadas muy rápidamente.
🔴 Guerra entre Israel y Hamás en Gaza, DIRECTO | Última hora del conflicto con Palestina
Nidal Hamdouna, trabajador humanitario de la organización Church Aid, ha dicho que cree "que esta es la mayor escalada a la que me enfrentaré. Nací aquí en Gaza y he sido testigo de otras escaladas". En este sentido, constata y recoge The Guardian que "la situación que afrontamos implica intensos ataques aéreos y bombardeos contra varios lugares de la Franja de Gaza, incluido mi barrio," ha destacado, hablando desde el extremo norte de la ciudad de Gaza. "El problema es que no existe ningún lugar seguro a donde ir de Gaza en este momento".
Así, destaca que estuvo presente en las guerras de 2008, 2014 y 2021, pero destaca que este episodio está siendo único en términos de intensidad. Constata que familias enteras han sido asesinadas. "La preocupación es hasta qué punto los civiles están protegidos, pero también cómo encontrar un lugar seguro, aunque no haya lugar seguro a donde ir".
La frontera entre Gaza y Egipto, el único punto de entrada no controlado por Israel, quedó tocada por un ataque israelí el martes, por tercera vez en veinticuatro horas, según una ONG egipcia. La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) ha dicho que más de 200.000 personas han sido desplazadas en Gaza y se espera que dicha cifra aumente. Según destaca el mismo diario británico, los ataques aéreos arrasaron 790 unidades de vivienda, dijo, y dañaron gravemente 5.330.
El sistema sanitario de Gaza, en peligro
El número creciente de heridos corre el riesgo de hacer colapsar lo que queda del frágil sistema sanitario de Gaza después de un bloqueo de 16 años por parte de las autoridades israelíes, que han restringido la entrada de personas, combustible, materiales de construcción y alimentos.
Mahmoud Shalabi, de la organización humanitaria Ayuda Médica para los Palestinos, ha destacado, según recoge The Guardian: "El hospital de Beit Hanoun, en el norte de Gaza, ha estado fuera de servicio debido a los daños colaterales que sufrió por los bombardeos a su alrededor. Además, las carreteras a su alrededor quedaron destruidas, por lo que ahora no es posible acceder a él".
Shalabi también describió los daños sufridos en el mayor hospital de Gaza, Al-Shifa, en la ciudad de Gaza, que durante mucho tiempo ha actuado como punto central de atención para los residentes del enclave, particularmente durante momentos de crisis.
La ONU, preocupada
El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su preocupación por los informes crecientes de que los ataques aéreos y los bombardeos israelíes habían afectado la infraestructura civil. "Si bien reconozco las legítimas preocupaciones de seguridad de Israel, también le recuerdo que las operaciones militares deben efectuarse en estricta conformidad con el derecho internacional humanitario", ha destacado. "Los civiles tienen que ser respetados y protegidos a todas horas. La infraestructura civil nunca debe ser un objetivo".