La Administración de Donald Trump ha desclasificado 1.123 documentos relacionados con el asesinato del presidente estadounidense John F. Kennedy (JFK) el año 1963. Muchos de los documentos relacionados con el asesinato del presidente demócrata ya han sido revelados, incluidos los 13.000 documentos publicados durante el mandato de Joe Biden, según informa la CNN. El director de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, ha afirmado en un comunicado que se han publicado “aproximadamente 80.000 páginas de registros previamente clasificados”.
Según informa la cadena estadounidense, se espera que pase un tiempo hasta que los especialistas puedan revisar los nuevos documentos desclasificados. Sin embargo, no se espera que esta nueva desclasificación de documentos suponga un cambio en lo que se conoce hasta ahora del asesinato de Kennedy. Sin embargo, como siempre que se han desclasificado documentos sobre este caso, ha habido mucha expectación, ya que las teorías conspiranoicas sobre el asesinato del presidente demócrata hace años que toman peso.
Un compromiso desde el primer día
Las primeras horas de este segundo mandato de Trump estuvieron marcadas por la ola de decretos que firmó justo después de tomar posesión. Entre estas órdenes ejecutivas hay una para desclasificar documentos relacionados con el asesinato de JFK, de Robert F. Kennedy y de Martin Luther King, los dos últimos en el año 1968. Sin embargo, durante el primer mandato, Trump no se mostró así comprometido con la transparencia sobre el caso de JFK. En el año 2017 impidió que se desclasificaran parcialmente una serie de documentos sobre el caso. “No tengo más remedio que aceptar ciertas condiciones antes que causar un daño irreversible a la seguridad de la nación”, afirmó entonces.
Dudas entre los ciudadanos estadounidenses
La muerte de Kennedy se ha atribuido a un único pistolero, Lee Harvey Oswald, tesis que diferentes organismos del gobierno federal han reafirmado durante las últimas décadas. Sin embargo, las encuestas revelan que muchos ciudadanos de los EE.UU. creen que el asesinato fue el resultado de una conspiración más amplia. Entre los escépticos está el nuevo secretario de salud, Robert F. Kennedy —hijo de Robert Kennedy y sobrino de JFK—, ha dicho que cree que la CIA estuvo involucrada en la muerte de su tío. Tampoco se ha creído nunca la versión oficial sobre la muerte de su padre, hasta el punto de decir que el hombre condenado por el asesinato del año 1968 (la noche después de ganar las primarias presidenciales de California) es inocente y que tendría que ser liberado.