Las quejas y sospechas de Donald Trump sobre un supuesto fraude electoral que no tienen base en ningún tipo de pruebas empezaron en 2020 al día siguiente que Joe Biden ganara las elecciones y acabaron reventando en el asalto al capitolio del 6 de enero. Este año, el expresidente y candidato a la Casa Blanca no ha esperado tanto. Cuando todavía ni siquiera ha acabado el periodo del voto anticipado, que permite enviar por correo o depositar la papeleta en la urna desde semanas antes de la jornada electoral del día 5, ya está agitando este fantasma. Tampoco acepta la derrota de 2020 y, esta vez, promueve la sospecha con una ayuda inestimable, la de Elon Musk amplificando en X su mensaje.

El estado que tiene que tener la llave de las elecciones es Pensilvania, que de los que bailan entre los dos candidatos es el que más votos electorales aporta, 19, y es allí donde se está centrando la campaña de desinformación de Trump y de algunos seguidores sobre un posible fraude. Al mismo tiempo, según apuntan investigaciones de la CNN publicadas este jueves, los activistas trumpistas de MAGA (Make America Great Again) preparan acciones si gana Harris y hace tiempo que difunden que las elecciones están amañadas.

El pasado martes, Trump publicaba en su red social, Truth, un mensaje contundente para sus 8 millones de seguidores: "GUAU, el contado de York, en Pensilvània, ha recibido miles de formularios de grabación de voto y votos por correo potencialmente fraudulentos. Eso se añade a que en el condado de Lancaster han atrapado 2.600 papeletas y formularios falsos, todos escritos por la misma persona. Cosas muy malas. ¿¿¿QUÉ ESTÁ PASANDO EN PENSILVANIA??? Las fuerzas de la orden tienen que hacer su trabajo, inmediatamente!!! GUAU!!!. La publicación tiene 19.700 likes y 8.000 republicaciones. Repitió el mismo tipo de sospechas durante su mitin en Allentown el martes.

Además, el activista conservador y simpatizante de Trump Scott Presler compartió un vídeo de un funcionario del contado de Luzerne comentando que se tenían que abordar las "inconsistencias" del voto anticipado porque, si no, "los votantes de Pensilvania no pueden confiar en unas elecciones justas y libres".

No solo lo compartió con sus 1,7 millones de seguidores en X, sino que Elon Musk lo retuiteó hacia sus 202 millones de seguidores con un mensaje: "Eso tiene que investigarse".

Las explicaciones oficiales no hacen sospechar

Pero todos los portavoces oficiales de estos territorios han negado problemas mayores y han explicado que, de hecho, todos estos casos de posibles fraudes han sido investigados, tienen como origen votantes de ambos partidos y son una muestra justamente que el sistema electoral funciona.

En el caso del contado de Luzerne, el fiscal del distrito, el republicano Sam Sanguedolce, dijo que la oficina investigó y los indicios y que "ninguna de las inscripciones fue fraudulenta", en un comunicado oficial citado por el Wall Street Journal. La administradora del contado, Romilda Crocamo, añadió que "hay gente que, sin importar lo que digamos o hagamos, no creerán que estamos siguiendo el sistema".

El mismo medio explica que las autoridades de Lancaster informaron el viernes pasado que estaban investigando 2.500 solicitudes de inscripción de votantes potencialmente fraudulentas que justamente no procesaron y que tenían gente de diferentes partidos. El funcionario electoral Schmidt, republicano, aseguró que las acciones mostraban que las salvaguardias del proceso de registro de votantes funcionan.

Trump y sus seguidores todavía afirman que las elecciones de 2020 no fueron ganadas limpiamente por Biden y el pasado viernes el candidato aseguró a las redes: "Cuando gane, la gente que trucó las elecciones será procesada con todo el peso de la ley".

Recta final ajustada

A solo 4 días de las elecciones presidenciales, las últimas encuestas de la CNN muestran casi empates entre Harris y Trump a los estados clave de Georgia, Carolina del Norte, Nevada y Pensilvània, mientras que Harris ganaría ventaja a Michigan y Wisconsin, que podrían decantar las elecciones hacia el lado demócrata.

Los votos de las minorías y de los indecisos serán clave para decidir al presidente, por lo cual no ayudan resbalones como los de Joe Biden asegurando que los votantes de Trump son "basura" o el comentario que origina esta reacción, del cómico afín al republicano que dijo que Puerto Rico es "una isla de basura".

Muy pendientes de cómo reaccionarán los votantes latinos a este comentario, Harris dedica sus últimos discursos a recordar las amenazas de Trump para la democracia y a reivindicarse como garante de la orden institucional, mientras celebridades de Puerto Rico como Ricky Martin o Bad Bunny le han dado apoyo. Este viernes, em Milwaukee, la estrella del pop Cardi B participará en un discurso de Harris en Milwaukee. 

Trump, mientras tanto, continúa su campaña hiperbólica sobre las supuestas amenazas criminales de los migrantes, los riesgos de fraude y una apelación muy emocional al sentimiento de comunidad y de familia de sus votantes, así como una visión catastrófica de la economía que tampoco casa con la realidad.

El último espectáculo para darle la vuelta a la tortilla fue llegar a un mitin conduciendo un camión de basura como respuesta a Biden. El fantasma del fraude forma parte del show y hace que, gane o pierda, los demócratas tengan motivos para estar preocupados por su posible reacción.