Desde su retorno el lunes en la Casa Blanca, Donald Trump, no ha hecho más que firmar órdenes ejecutivas para deshacer el legado del predecesor, Joe Biden. Entre sus prioridades está acabar con los programas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) dentro de la administración pública. Es por eso que este miércoles ha comunicado a través de una circular de la Oficina de Gestión de Personal, que todos los empleados federales que desarrollan funciones de diversidad, equidad e inclusión pasarán a estar en permiso retribuido, los envía a su casa, con la previsión que a finales de mes cuando cierren las oficinas donde trabajan, se queden sin trabajo.
La circular que ha llegado a los jefes de departamentos y agencias, establece como límites este miércoles por la tarde para informar a los trabajadores que se les pondrá en baja administrativa remunerada, mientras las agencias se preparan para cerrar todas las oficinas y programas relacionados con la DEI y eliminan todos los sitios web y cuentas de redes sociales de estas oficinas. También pide a las agencias federales que presenten un plan escrito antes del 31 de enero para despedir a los trabajadores.
Donald Trump firmó el lunes una orden ejecutiva que ponía fin a estos programas de diversidad, equidad e inclusión, que el nuevo presidente considera "radicales y malbaratadors", y que obliga a las agencias federales a cerrar las oficinas y los programas de DEI. "El presidente Trump hizo campaña para poner fin a la lacra de los programas DEI de nuestro gobierno federal y devolver América a una sociedad basada en los méritos donde la gente se contrata en función de sus habilidades, no por el color de su piel", defendía este martes a la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
El orden no afectará solo a las agencias federales, porque Trump también ha ordenado al fiscal general que cree un plan para disuadir el sector privado de adoptar o continuar programas DEI. Este tendrá un plazo de 120 días para presentar "recomendaciones para hacer cumplir las leyes federales de derechos civiles y tomar otras medidas adecuadas para animar el sector privado a que pongan fin a la discriminación y las preferencias ilegales, incluida la DEI".
Durante su discurso inaugural, Trump ya anunció que convertiría "política oficial" de su nuevo gobierno, reconocer solo dos identidades de género: "El masculino y el femenino", revirtiendo la capacidad de los norteamericanos de marcar "otra" o "X" a los formularios federales. Entre otras cosas, la orden garantizará que "los fondos federales no se utilizarán para promover la inclusión de género".