El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha afirmado que, después de hablar por teléfono con su homólogo ruso, Vladímir Putin, se han comprometido a iniciar negociaciones "inmediatamente" para detener la guerra en Ucrania. "Hemos acordado trabajar juntos, muy de cerca, incluso visitando las naciones de cada uno. También hemos acordado que nuestros respectivos equipos inicien las negociaciones inmediatamente", ha manifestado en declaraciones en la prensa. Desde el Kremlin, un portavoz ha informado que la conversación duró una hora y media y que Putin ha invitado al mandatario estadounidense a visitar Moscú, según recoge Reuters. Ningún presidente estadounidense ha visitado Rusia en más de una década, el último fue Barack Obama en 2013.

La primera acción de Trump tras este anuncio ha sido llamar al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, con el que ha hablado una hora. Este último ha informado que ha debatido con Trump sobre las opciones para conseguir la paz y la predisposición para trabajar en equipo. En este sentido, ha dicho que han planteado la preparación de un nuevo documento sobre seguridad, cooperación económica y de recursos. "Nadie quiere la paz tanto como Ucrania", ha asegurado Zelenski.

Trump afirma que tanto Rusia como Ucrania "quieren la paz"

Trump ha definido la conversación con el presidente ruso como "larga y altamente productiva", y ha explicado que también han abordado el conflicto en Oriente Próximo o la IA. Aseguró que coincidieron en que quieren "detener los millones de muertos" que se producen en la guerra en Ucrania, y que ya ha ordenado a un equipo, liderado por el secretario de Estado, Marco Rubio, que inicie las negociaciones. Tras la llamada con Zelenski, ha informado de que ha constatado que tanto Rusia como Ucrania "quieren la paz". "Es la hora de detener esta guerra ridícula, en la que ha habido muerte y destrucción de forma masiva e innecesaria", ha dicho. El mandatario estadounidense siempre ha defendido que la invasión rusa de Ucrania no se habría iniciado en caso de que él hubiera estado en la Casa Blanca, e, incluso antes de su regreso a la presidencia, había asegurado ser capaz de poner fin al conflicto con una llamada a Putin y Zelenski.

La llamada Trump-Putin se ha producido poco después de que el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, haya tumbado las aspiraciones de Ucrania de ingresar en la OTAN y de volver a las fronteras anteriores a 2014, objetivos que ha definido como "poco realistas". "Perseguir este objetivo ilusorio solo prolongará la guerra y causará más sufrimiento", ha señalado Hegset nada más empezar una reunión de países aliados de Kyiv en Bruselas. Hegseth también ha dejado claro el cambio de posicionamiento de la Administración americana y ha advertido a los países europeos que tendrán que encargarse de la gran mayoría de la financiación militar en Ucrania. Por otra parte, el secretario del Tesoro de EEUU, Scott Bessent, se ha reunido con el presidente ucraniano en Kyiv, con quien ha debatido un posible acuerdo económico, que consistiría en que Ucrania vendiera minerales extraños a EEUU a cambio de apoyo militar. Zelenski ha expresado la voluntad de poder cerrar este acuerdo en la Conferencia de Seguridad de Múnich, prevista para este fin de semana.