Los aranceles impuestos por el presidente estadounidense, Donald Trump, están sacudiendo las bolsas mundiales y cambiar las alianzas geopolíticas. A pesar de las pérdidas millonarias en los mercados internacionales y las amenazas del republicano, algunos países tienden la mano en Washington para negociar. Sin embargo, las potencias que apuestan por el diálogo se han topado con la mofa y la humillación del presidente de Estados Unidos (EE.UU.). "Estos países nos están llamando. Me besan el culo. Se mueren para llegar a un acuerdo", ha afirmado Trump ante el Comité Republicano.
La Casa Blanca ha asegurado que 70 países han empezado a negociar una reducción de los aranceles a cambio de medidas que permitan corregir los desequilibrios comerciales con EE.UU. Lejos de llevar con discreción estas negociaciones, Trump no solo ha hecho pública su existencia, sino que ha humillado a sus interlocutores afirmando que los líderes extranjeros le están rogando: "Por favor, por favor, señor, llegue a un acuerdo. Haré lo que sea, señor". Además, el republicano ha aprovechado este discurso para cargar contra los díscolos de su partido que no apoyan los aranceles. Para el magnate, que sus aliados se arrastren para negociar significa que funcionan.
Las declaraciones de Trump coinciden además con el momento en que delegaciones de países como Corea del Sur y Japón viajan a Estados Unidos para negociar los aranceles, mientras que la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, afín a Trump, lo hará la próxima semana.
China no se amedrenta
El presidente chino, Xi Jinping, ha abogado este miércoles por "fortalecer los lazos estratégicos con los países vecinos" en la primera aparición pública desde que Donald Trump aumentó sus aranceles al país asiático hasta llegar a un 104%.
Xi, que no mencionó al mandatario estadounidense, ha instado durante una reunión de trabajo a sus funcionarios a mejorar las relaciones con los países vecinos "mediante una gestión adecuada de las diferencias" con vistas a "fortalecer vínculos en las cadenas de suministro", según informa EFE. En la reunión, Xi ha destacado que las relaciones de China con sus vecinos se encuentran "en el mejor nivel en la historia moderna" pero que, al mismo tiempo, Pekín está entrando en "una etapa crucial profundamente entrelazada con los cambios en la dinámica regional y los acontecimientos globales".
Por su parte, el pasado martes, Trump aseguró que Pekín quiere un acuerdo sobre aranceles "desesperadamente", pero consideró que no sabe "cómo empezar a negociar" y subrayó que la Casa Blanca espera la llamada de Xi.