Por primera vez en 40 años, la ceremonia de investidura de un presidente de los Estados Unidos se celebrará en el interior del Capitolio. Así lo ha confirmado este viernes el presidente electo, Donald Trump, que ha justificado el cambio por las bajas temperaturas que castigarán a la capital Washington D.C. Las previsiones vaticinan que una ola de frío glacial someterá a los asistentes a los -6 °C, con una sensación térmica que podría llegar a los -13 °C. De esta manera, el republicano jurará el cargo en la rotonda bajo la gran cúpula de la sede del legislativo norteamericano.

"Es mi obligación proteger a la gente de nuestro país, pero, incluso antes de empezar, tenemos que pensar en la misma inauguración", ha dicho Trump. El magnate ha expuesto que la combinación del frío con el viento podría provocar la llegada a mínimos históricos con respecto a la temperatura. "Son condiciones peligrosas para las decenas de miles de agentes de la ley, personal de emergencias, perros policía e incluso caballos, y centenares de miles de simpatizantes que estarán fuera durante muchas horas el día 20", ha declarado en su plataforma Truth Social. El republicano, sin embargo, se ha dirigido a los que quieran venir a pesar de las condiciones meteorológicas y les ha instado a "vestirse calurosamente".

La última vez que un presidente juró el cargo en el interior fue el 21 de enero de 1985, durante el segundo acto de investidura de Ronald Reagan. El termómetro marcaba -14 °C e incluso llegó a cancelarse el desfile inaugural. Este año, Trump ha asegurado que a pesar del cambio de escenario, se mantendrán el resto de acontecimientos, incluidas las actuaciones inaugurales.

La agencia de noticias Associated Press ha dicho que se esperan cerca de 250.000 asistentes a las diferentes aproximaciones al Capitolio. En este sentido, Trump ha asegurado a sus seguidores que habilitará el Capital One Arena, un pabellón próximo al acto inaugural que tiene un aforo de 20.000 personas. El magnate tiene pensado sumarse después de jurar el cargo para celebrar la "victoria" y hacerse la fotografía con la multitud aplaudiéndole, ya que no podrá tenerla en la explanada del Capitolio y a lo largo del Mall.