Este 1 de septiembre los niños y niñas han vuelto a la escuela. Pero, este año, tampoco ha sido un inicio de curso normal. Si durante los dos últimos años el coronavirus había marcado también la normalidad en las escuelas, este nuevo curso escolar en Ucrania no empieza normal. El Ministerio de Educación y Ciencia del país detallaba, hace sólo unos meses, que el curso escolar empezaría de manera presencial en todas partes este septiembre a pesar de la guerra. Sin embargo, las cosas no han ido del todo como se esperaba. El séptimo mes de la invasión rusa en Ucrania no se espera menos intenso.
Las autoridades del país están construyendo refugios y reparando miles de edificios estropeados por los bombardeos por las fuerzas rusas. En principio, este nuevo curso escolar acoge, ya sea presencial y online, unos seis millones de niños y niñas. Desde el ministerio siempre han remarcado que el hecho de abrir las escuelas de no era una prioridad, sobre todo, teniendo en cuenta el impacto social y económico a largo plazo de la guerra.
Tal como recoge Reuters, casi 2.300 instituciones educativas fueron bombardeadas desde que empezó la guerra el pasado 24 de febrero. Unas 286 fueron completamente destruidas, según el mismo Ministerio de Educación. Más de 350 niños han muerto y 586 han resultado heridos.
Refugios antiaéreos en las escuelas
Los funcionarios están ansiosos por recuperar cierta normalidad. Aunque normalidad, no la hay. Han evaluado cerca del 80% de las 26.000 instalaciones educativas de Ucrania, desde preescolar hasta las universidades. La sorpresa, tal como recoge la misma agencia, ha sido que solo el 41% de las instituciones tiene refugios antiaéreos o estructuras de protección necesarias para la instrucción en persona.
Eso es un aumento del 400% con respecto a hace unos meses y todavía podrían completarse más refugios en las próximas semanas. La disponibilidad es baja cerca del frente, en la región de Mykolaiv, donde las fuerzas rusas intensifican los bombardeos. Como consecuencia, miles de estudiantes se verán obligados a seguir estudiando de manera remota. Un hecho que agrava el aprendizaje, que ya venía marcado por la covid. En principio, solo se reabren las escuelas que se sitúen en áreas que no suponen una amenaza regular de los bombardeos y se ha recomendado optar por la educación online.
A pesar de todo, los maestros están informados sobre qué tienen que hacer en caso de que suenen las sirenas. A todos los niños y niñas que vayan personalmente a la escuela, se les ha dicho que tienen que llevar una bolsa de emergencia con una muda de recambio, medicamentos que puedan necesitar, una nota de sus padres y también, para los más pequeños, un juguete.
Más de 22.000 maestros han huido de la guerra
Millones de personas han huido de la guerra de Ucrania, incluyendo 22.000 maestros, según Sergii Gorbachov, defensor del pueblo de Ucrania en materia de educación. Quedan unos 440.000 profesores, pero el problema es la migración interna.
Hace unos meses, desde el Ministerio de Ucrania se prometieron cambios para el curso escolar. Tal como recogía el portal de noticias mrpl.city, habrá más materia escolar en defensa de la patria. ¿Qué quiere decir eso? "Los cambios se referirán a reforzar la orientación práctica de esta asignatura. Los niños necesitan saber. Se fortalecerá y se reforzará la educación nacional-patriótica. Y habrá una unidad separada que se ocupará de acciones contra las minas", han especificado. Además, también habrá modificaciones en la asignatura de literatura extranjera. Así, está previsto que muchos libros rusos, caigan del currículum. "Por ejemplo, Guerra y Paz, ya no se estudiará en Ucrania. Algunos libros irán desapareciendo del programa a la hora de estudiar literatura extranjera", remarcaron. De esta manera, el mismo portal constata que se harán cambios en la metodología de enseñanza de historia de Ucrania y también de historia mundial.
Rusia vuelve a la escuela con una asignatura patriótica
Por otra parte, los niños y niñas rusas también han vuelto a la escuela esta semana. Los estudiantes tendrán una nueva materia: "conversaciones sobre cosas importantes", una clase misteriosa que los críticos creen que se utilizará para hacer propaganda sobre la invasión de Ucrania por parte de Rusia, destaca el The Guardian. Los activistas rusos piden a los padres y a los profesores que boicoteen las lecciones "patrióticas" necesarias en las escuelas rusas que muchos temen intentarán adoctrinar estudiantes de seis años.
"Muchos directores por miedo de sus jefes están mintiendo a los padres, diciéndoles que estas clases de propaganda son obligatorias", dijo el miércoles el sindicato la Alianza de Maestros de Rusia. "Una vez más estamos diciendo que no estáis obligados a dejar a vuestros hijos a estas clases". Hay que recordar que algunos maestros han sido castigados para manifestarse contrarios a la guerra.