La Unión Europea ha ofrecido este lunes al Reino Unido negociar para la futura relación entre ambas partes un acuerdo comercial "altamente ambicioso" sin aranceles ni cuotas para todos los bienes que entren en el mercado único. "Estamos preparados para ofrecer un acuerdo comercial altamente ambicioso como el pilar central de esta asociación, incluidos cero aranceles y cero cuotas en todos los bienes que entren en nuestro mercado único de 450 millones de personas", ha declarado el negociador comunitario con el Reino Unido, Michel Barnier, durante una rueda de prensa.
El político francés ha presentado ante los medios de comunicación la propuesta de directrices de la Comisión Europea para la negociación con Londres en los próximos meses. Barnier ha añadido que la propuesta de Bruselas también incluye en el acuerdo de libre comercio los servicios, incluidos los de empresas, telecomunicaciones o medioambientales, así como el comercio digital, la propiedad intelectual y el acceso a los mercados de contratación pública del Reino Unido y de los Veintisiete.
El negociador comunitario también ha reconocido que habrá una "fuerte competencia" entre ambas partes, y ha considerado que eso es "normal", pero ha subrayado que la proposición de la Comisión "deja claro que esta oferta excepcional está condicionada a al menos dos cosas". "La primera es que tenemos que asegurarnos de que la competencia es y sigue siendo abierta y justa", afirmó, y recordó que ya se ha acordado con el primer ministro británico, Boris Johnson, que la futura relación "evitará las ventajas injustas de competencia".
Como segunda condición para cerrar el acuerdo de libre comercio, señaló que ese convenio debe incluir un acuerdo pesquero. "Este acuerdo debe mantener un acceso continuado y recíproco a los mercados y a las aguas" con unas cuotas establecidas, especificó Barnier.
En el ámbito de la seguridad, el negociador comunitario ha señalado que la lucha contra el terrorismo o la ciberdelincuencia exige "una estrecha colaboración" entre Londres y Bruselas "en el medio y largo plazo", y también ha mencionado las "amenazas para nuestra seguridad exterior que vengan de grupos que buscan desestabilizar nuestras democracias", el intercambio de datos o la cooperación judicial y policial en materia penal.
Barnier ha advertido, además, de que toda futura cooperación en seguridad deberá respetar la Convención Europea de Derechos Humanos y los estándares adecuados de protección de datos y ha agregado que la cooperación estará sometida a mecanismos para resolver las diferencias.
Tras la salida del Reino Unido de la UE, comenzó el pasado 1 de febrero una transición hasta finales de 2020 en la que la legislación comunitaria se seguirá aplicando en territorio británico y en la que Londres y Bruselas negociarán su futura relación. Se espera que la propuesta de mandato negociador que ha presentado Barnier reciba el visto bueno de los Estados miembros en una reunión de ministros europeos el 25 de febrero. A partir de ese momento, podrá comenzar la negociación entre la UE y el Reino Unido.