La Agencia Central de Inteligencia o la CIA es vox populi. Hay poca gente que no sepa qué es la CIA, pero saber qué hace, con exactitud, es más complejo. La agencia gubernamental de los EE.UU. se encarga de recopilar y analizar el uso de la información en el exterior del país, ya sea sobre grupos, gobiernos, cooperaciones o individuos. Especialmente, todo aquello que pueda afectar a la seguridad nacional del país o de sus intereses económicos o geoestratégicos. Ahora, la Unión Europea ha recibido órdenes de lanzar su propia agencia de espionaje. Como aparte de una revisión exhaustiva de la preparación del bloque para la guerra y las crisis publicadas el miércoles, el expresidente finlandés Sauli Niinistö considera que la UE necesita su propia agencia de inteligencia para ayudar a los países a defenderse de las amenazas, los saboteadores y agentes extranjeros que operan en las capitales de todo el continente a través de un intercambio de información más grande. En marzo, Niinistö —quién fue presidente de Finlandia durante más de una década— recibió una misión de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, para entregar un informe detallado sobre la preparación del bloque para la guerra y la defensa civil, junto con propuestas de mejora, tal como recoge la publicación Politico.eu.
El presidente ruso, Vladímir Putin, hace años que entrega una guerra en Ucrania en la frontera oriental de la UE, y sus agentes están activos en todo el bloque, hecho que genera preocupación sobre la capacidad de las agencias nacionales por predecir actividades e influencias maliciosas. De esta manera, en su plan, Niinistö pide en la UE que desarrolle un "servicio de cooperación de inteligencia completo en el ámbito de la UE que pueda atender tanto las necesidades estratégicas como las operativas", y añade que hace falta "una red antisabotaje" para proteger la infraestructura. En este sentido, según lo que dice, hay que trabajar más para "mejorar el trabajo de lucha contra el espionaje a las instituciones de la UE", dijo después de presentar el plan al lado de Von der Leyen, y recoge la misma publicación.
La idea, sin embargo, de crear una CIA europea no es nueva. De hecho, en el 2015, después de los ataques terroristas de París, lo entonces primer ministro belga, Charles Michel, propuso la creación de una CIA Europea para luchar de manera más efectiva contra el terrorismo. Entonces, en el 2017, un artículo de la Universidad CEU, constataba que eso era muy complejo, aunque el hecho de que se propusiera parecía que daba pie al hecho de que, una lucha contra el terrorismo, podría afrontarse de esta manera, y mejorando las capacidades de una UE en horas bajas. Entonces, también sonaba muchísimo la necesidad de una política de seguridad y defensa común, una asignatura siempre pendiente de la Unión.
Guerra de diplomáticos expulsados y actividad frenética
Ahora, sin embargo, situándonos en tiempos actuales, numerosos diplomáticos han sido expulsados de las capitales en medio de acusaciones de espionaje y Bruselas se ha convertido en un foco de actividad de agentes con centenares de instituciones y embajadas ubicadas en la ciudad. Además, la guerra de Rusia contra Ucrania ha provocado caos en toda la UE: desde drones que vigilan los centros de entrenamiento del ejército hasta intentos frustrados de asesinato a ejecutivos de armamento y ataques a infraestructura submarina.
Los aliados occidentales ya comparten inteligencia (la red Five Eyes une las agencias de los Estados Unidos, Australia, Canadá, Nueva Zelanda y el Reino Unido) y esta agencia de la UE tendría que centrarse en hacer un buen uso de la información que ya es a funcionamiento, dijo Niinistö. "Necesitamos confiar los unos en los otros", insistía Niinistö y destacaba Politico.eu.
¿Hay posibilidades reales de tener una CIA europea?
La idea es estimulante, especialmente por el periodo que está atravesando la UE. Ahora bien, también es cierto que hay pocas posibilidades que la UE esté a punto de seleccionar los mejores y más brillantes de sus reclutas para una carrera en misiones de alto riesgo al extranjero en un futuro próximo, sobre todo porque los países miembros señalarían el permeable brazo ejecutivo de la UE como una razón para no hacerlo. "Todos sabemos que la recopilación de información es responsabilidad primordial de los Estados miembros", afirmó Von der Leyen y recogía la misma web. "Tendríamos que seguir mejorando el flujo de información y la recopilación de información".
Por otra parte, según habría dicho, hay muchas otras áreas donde el bloque tendría que reforzar su preparación para el conflicto. En este sentido, habría propuesto una Ley de Preparación de la UE que establecería "principios, normas y objetivos" bajo los cuales los países tendrían que cooperar. Por ejemplo, la UE no tiene un millón de expertos en ciberseguridad, dijo Niinistö, y si bien no está abogando por el reclutamiento militar, sí que aboga para que las capitales introduzcan programas que incorporen a los civiles a la defensa nacional. Las agencias de seguridad también necesitan "hacer el más difícil posible que servicios de inteligencia extranjeros hostiles operen a cualquier lugar de la UE", constata la misma publicación.
Las amenazas de la UE
Tal como destaca Público, Bruselas ha catalogado China como rival competitivo de especial calibre dentro de la revisión geoestratégica que llevó a cabo Josep Borrell, como jefe de la diplomacia europea. Pero China no es el único actor a tener en cuenta. Lo mismo digital constata que hay otros peligros que se llaman híbridos, y reciben este nombre porque no son ataques directos. Se trata de los intentos de Rusia y Bielorrusia, por ejemplo, de desestabilizar la UE, ya sea con el envío de migrantes en el espacio comunitario o a través de ciberataques.