Varias figuras de la futura administración Trump han sido objetivos de amenazas de bomba, según la secretaria de prensa nacional de los republicanos, Karoline Leavitt. Los actos de intimidación han tenido lugar entre la noche de este martes y la mañana del miércoles y las fuerzas de la orden han actuado rápidamente para garantizar la seguridad de los atacados. Según Leavitt, "diversos de los candidatos al gabinete del presidente Trump y los nombrados por la administración han recibido amenazas violentas y antiamericanas contra sus vidas y los que viven con ellos". De todos modos, el Partido Republicano se ha mostrado fuerte y ha asegurado que "con el presidente Trump como ejemplo, los actos peligrosos de intimidación y violencia no nos disuadirán.

Uno de los miembros intimidados ha sido Matt Gaetz, el polémico candidato de Trump a la Fiscalía General hasta que se retiró por una investigación sobre un caso de abuso sexual y tenencia ilícita de drogas. Después de recibir la llamada, un equipo antibombas se ha desplazado hasta la residencia del excongressita, donde se encontraba un miembro de su familia, pero no han encontrado ningún indicio de explosivos.

Otra de las víctimas ha sido Lee Zeldin, un antiguo representante republicano de Nueva York que Trump ha elegido para dirigir la Agencia de Protección del Medio Ambiente. Zeldin ha comunicado a través de una publicación en la red social X que "una amenaza de bomba dirigida a mí y a mi familia ha sido enviada con un mensaje de temática propalestina". El candidato de Trump también ha asegurado que ni él ni su familia estaban en casa en el momento de la llamada, y que en este momento se encuentra "trabajando con las fuerzas del orden para saber más".

En la misma línea, la jefa del gabinete entrante de Trump, Susie Wiles, y Pam Bondi, la antigua fiscal general de Florida escogida para sustituir Gaetz, también han sido víctimas de las amenazas de bomba. Estos hechos se han producido en el momento en que el próximo presidente de los Estados Unidos está anunciando sus elecciones para el futuro gabinete, después de su victoria a las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.

Los actos de intimidación llegan posteriormente a los dos intentos de asesinato que ha sufrido Donald Trump. El primero se produjo este julio durante un acto de campaña al estado de Pensilvània, cuando una bala rozó la oreja del candidato republicano. El otro, en septiembre, cuando un hombre fue acusado de intentar asesinarlo mientras se encontraba jugando en un campo de golf de Florida.