En 2016 el puente Morandi de Génova fue sometido a unas largas y costosas obras de mantenimiento, que duraron más de un año y que parece ser que no resolvieron los problemas. Estas acciones sobre el puente reflejan las dudas que había sobre su solidez. El colapso del viaducto Morandi no ha sido una sorpresa para algunos especialistas. En realidad, algunos ingenieros han cuestionado enérgicamente los proyectos de Riccardo Morandi y no lo consideran un genio, aunque había recibido muchos reconocimientos, en Italia y a nivel internacional. El viaducto Morandi sufrió, ya hace años, problemas graves de altibajos del tablero, a causa de los efectos diferidos del hormigón. Hicieron falta muchas correcciones para conseguir que el plano del puente se mantuviera horizontal. Por otra parte, a finales del siglo pasado, se tuvieron que sustituir los cables de suspensión, que no eran suficientemente resistentes. Además, en los últimos años se había detectado un fuerte deterioro del hormigón armado.
Los costes de mantenimiento del puente Morandi a lo largo del tiempo han sido muy elevados. Todo parecía indicar, ya, que el puente de Morandi no resistiría lo que se considera la vida mínima de una infraestructura de este tipo (100 años). Para evitar los elevados costes de mantenimiento, algunos ingenieros, como el profesor Antonio Brencich, ya sugirieron hace años derribarlo y hacer uno nuevo.
El caso de Génova no es lo único. El más famoso de los puentes de Morandi, el que se sitúa sobre el lago de Maracaibo, en Venezuela, tuvo que modificarse en el 2000, con unas reformas muy costosas. También se tuvieron que sustituir los cables de suspensión, porque se consideró que los originales no eran lo bastante resistentes.
El viaducto Morandi en la localidad de Agrigento también tuvo graves problemas. En 2017 se tuvo que cerrar para llevar a cabo serias operaciones de mantenimiento ante el deterioro estructural de los pilares (a simple vista se veían en pésimo estado). De hecho, en las redes sociales, en 2017, se difundió una campaña que advertía a los conductores que no pasaran por el viaducto, al considerarlo "poco seguro".