La fría relación entre Donald Trump y su mujer, Melania Trump, no ha pasado desapercibida ni durante la última campaña del magnate ni en su anterior mandante. Además, durante la campaña Melania, normalmente reservada sobre sus postulados políticos, afirmó que estaba a favor de proteger el derecho al aborto. Todo se suma al hecho de que Melania no se presentó a la tradicional y simbólica reunión entre el presidente saliente y el entrante del pasado miércoles. En este contexto, varias voces en los Estados Unidos se cuestionan como será Melania en este nuevo mandato como primera dama y ni si tan solo se trasladará a la Casa Blanca.

Según informa la CNN, es poco probable que Melania Trump se traslade a Washington a tiempo completo en su segunda ronda como primera dama. La misma Melania Trump ya apuntó en una entrevista amistosa en Fox News que este segundo mandato será diferente: "No estoy nerviosa porque esta vez es diferente. Tengo mucha más experiencia y muchos más conocimientos. Antes estuve en la Casa Blanca. Cuando entras, sabes exactamente qué esperar".

Se espera que Trump pase la mayor parte de su tiempo durante los próximos cuatro años no a la Casa Blanca, sino entre la ciudad de Nueva York y Palm Beach, Florida, han afirmado en la CNN fuentes próximas a la primera dama. Las mismas hasta apuntan que ella todavía estaría presente en los grandes acontecimientos.

Experiencia como primera dama

La historiadora Heath Hardage Lee, ha apuntado en EFE que Melania Trump no fue una primera dama tradicional. "No aceptó los protocolos y las expectativas previamente establecidos con respecto a las primeras damas", ha subrayado Lee.

En opinión de la profesora de Comunicación en la Universidad de Boston y experta en primeras damas, Tammy Vigil, su principal legado fue "romper con la tradición". "Su ruptura con algunas convenciones con respecto a las primeras damas contemporáneas abrió oportunidades porque las futuras primeras damas quizás serán menos criticadas para tomar sus propias decisiones sobre como y cuando cumplir las expectativas del papel", ha señalado.

Más detalles del futuro gobierno de Trump: un antivacunas al frente de Salud

Trump ha designado como secretario de Salud y Servicios Humanos de su gobierno al polémico Robert F. Kennedy Jr. Se trata de un nuevo nombramiento polémico por sus posturas antivacunas y anticientíficas. Kennedy es sobrino del asesinato presidente John Fitzgerald Kennedy e hijo del senador Robert Kennedy, que también fue asesinado. Pero su popularidad se debe más a sus polémicas posturas antivacunas y a haberse hecho eco de múltiples teorías de la conspiración.