Tras el atentado terrorista de este lunes, en el que un ciudadano de origen tunecino en situación irregular en Europa y con una orden de expulsión vigente mató a tiros a dos personas en una céntrica calle de Bruselas, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha instado este miércoles a cambiar "urgentemente" el funcionamiento de las órdenes de repatriación de la Unión Europea, de forma que dejen de ser de carácter "voluntario" y que los estados miembros puedan expulsar de su territorio a las personas que consideren una "amenaza para la seguridad pública". "A las personas consideradas una amenaza para la seguridad que hayan recibido una orden de repatriación se les puede pedir actualmente que abandonen el país voluntariamente. Tenemos que cambiar esta situación con urgencia", ha afirmado la líder europea en una comparecencia en Bruselas, junto a los primeros ministros de Bélgica y Suecia, Alexander De Croo y Ulf Kristersson, que se han pronunciado en la misma línea.

De Croo y Kristersson asistieron previamente a una sencilla ceremonia de homenaje a los dos seguidores de la selección de fútbol sueca que fueron asesinados este lunes en Bruselas por un ciudadano tunecino sobre el que pesaba una orden de expulsión que no le pudo ser comunicada. En este contexto se enmarcan las declaraciones de Von der Leyen: la jefa del Ejecutivo comunitario ha propuesto que "si una persona es considerada una amenaza para la seguridad pública, los países deben tener el poder de obligarla a irse. Es parte del Pacto de la UE para la Migración y el Asilo", ha subrayado Von der Leyen.

Nuevo pacto migratorio de la UE

"Llevar a cabo con éxito el Pacto Europeo de Asilo y Migración es nuestra máxima prioridad", ha afirmado De Croo, cuyo país tomará el testigo de España en la presidencia semestral rotatoria del Consejo de la Unión Europea el próximo 1 de enero de 2024. Compuesto por varios pilares, este pacto ha entrado en su fase final de negociación entre representantes de las instituciones europeas después de adoptar los Veintisiete (el Consejo de Europa) y la Eurocámara sus respectivas posiciones negociadoras recientemente. Este pacto, muchos años aplazado, "está evolucionando en la dirección correcta, de momento; no vemos obstáculos importantes y realmente es una prioridad para nosotros ponerle fin", ha afirmado el primer ministro belga. "Hay dos dimensiones que debemos abordar de manera coordinada. En primer lugar, una mejor protección de nuestras fronteras exteriores. En segundo lugar, y yo diría que es igualmente importante, una política de retorno más decidida y más coordinada para las personas que se encuentran al final de los procedimientos migratorios", ha subrayado De Croo.

Blindar las fronteras europeas

En la misma línea se ha pronunciado el primer ministro sueco, Ulf Kristersson, que asegura que "muchísimas personas" a las que se les deniega el asilo en los estados miembros se niegan a abandonar el país. Lo que, a su juicio, elimina la diferencia entre conceder las solicitudes de asilo o rechazarlas. Además, Kristersson ha abogado por elevar las medidas de seguridad para proteger las fronteras de la UE con la finalidad de garantizar que los inmigrantes que llegan al territorio comunitario lo hagan de manera regular. "Si no somos capaces de proteger nuestras fronteras comunes, no podremos mantener la libre circulación dentro de Europa. Estas son partes extremadamente importantes de lo que significa ser una Comunidad Europea", ha agregado Kristersson, quien ha abogado también por un incremento de intercambio de información sobre migrantes irregulares entre países, y no solos entre agencias de inteligencia. Después del atentado terrorista previo al partido de fútbol entre las selecciones de Bélgica y Suecia, el primer ministro sueco ha hecho un llamamiento para que la UE sea "firme" en la seguridad de sus territorios y fronteras, del mismo modo que —asegura Kristersson— lo es "en la democracia, tolerancia, apertura y libertad".