La entrada de ayuda humanitaria para la población en la Franja de Gaza se vuelve a aplazar, aunque podría concretarse en las próximas horas, probablemente mañana sábado, según ha afirmado este viernes el portavoz de la Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria de la ONU, Jens Laerke. El secretario general de la ONU, António Guterres, y el coordinador humanitario de la organización, Martin Griffith, negocian con el Gobierno de Egipto la apertura del paso de Rafah, el único acceso al territorio palestino que no está bajo control militar de Israel. Después de dieciséis días de asedio israelí, con corte del suministro de agua, luz, gas y productos básicos, y bombardeos constantes sobre la Franja, las necesidades de los civiles son prácticamente cuestión de vida o muerte, explica Naciones Unidas: alimentos, agua, suministros médicos y combustible para que los generadores que alimentan con un mínimo de electricidad en los hospitales continúen en marcha.
"El combustible representa la supervivencia. Después de 9 días de apagón total, todo lo que funciona es gracias a generadores", ha indicado Laerke en una rueda de prensa en Ginebra, que asegura que "se mantienen negociaciones intensas y avanzadas con todas las partes implicadas para garantizar que la operación de ayuda a Gaza se inicie lo antes posible y en las condiciones adecuadas". El portavoz de Naciones Unidas ha añadido que "nos animan las informaciones de que las diferentes partes están a punto de llegar a un acuerdo sobre las modalidades y que la primera entrega está prevista para el próximo día". El portavoz sostiene que la esperanza es que se pueda empezar la entrega de ayuda en el sur de Gaza lo antes posible, de manera segura, protegida y continuada, de manera que la operación humanitaria pueda ampliarse rápidamente.
Visita fugaz de Guterres a Gaza
El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, ha urgido este viernes desde el paso fronterizo de Rafah, que une Egipto con la Franja de Gaza. En una visita relámpago al paso, el único acceso a la Franja que no está bajo control de Israel, Guterres ha subrayado que la entrada de ayuda a la zona es "absolutamente esencial", y que esta "operación humanitaria no es normal", sino una operación "urgente" para rescatar a personas "en un estado de guerra".
La ayuda humanitaria, a la espera en las puertas de Gaza
En los últimos días, varias agencias de Naciones Unidas, como el Programa Mundial de Alimentos o la Organización Mundial de la Salud, además de la Cruz Roja Internacional y las sociedades de socorro de la Media Luna Encarnada de varios países de la región, han llevado la ayuda más vital al lado egipcio del paso de Rafah, unas 3.000 toneladas de suministros que quedan a la espera de su apertura. Egipto ha indicado que no se había decidido a abrirlo en vista de la inseguridad, en particular por los bombardeos israelíes en la zona, donde se encuentran décimas de miles de gazatíes desplazados desde el norte del enclave por orden de Israel.
Alto el fuego y condiciones de paso
"Necesitamos que haya un mecanismo para acceder al sur de Gaza, pero mantenemos por descontado nuestra invocación a un alto el fuego para poder acudir en ayuda de todas las personas que lo necesitan, independiente de dónde se encuentren (dentro del enclave)", ha indicado el portavoz. No está claro cuál sería el alcance del acuerdo de acceso humanitario. Si fuera temporal o no, si incluiría a personal humanitario y médico, o si se permitirían al mismo tiempo evacuaciones desde Gaza, en particular de carácter médico y de los extranjeros que están esperando salir.