Sin duda, la retirada de Gerard Piqué ha cogido a todos por sorpresa, y ha conmocionado al mundo del futbol. Aunque su rol ya era claramente secundario, por no decir residual, pocos podían esperarse que decidiera colgar las botas a mitad de temporada, y sin previo aviso. Pero ha sido la manera de solidarizarse con la situación del Barça, y demostrar que prioriza el bienestar de la institución por encima de todo. Un bonito gesto.

El central de 35 años siempre aseguró que se marcharía en el momento en el cual notara que ya no era de ayuda, y que no quería convertirse en un lastre. Y eso es precisamente lo que ha hecho. Su video de despedida fue emotivo, y espera ganarse el perdón de la afición, que este fin de semana tendrá la oportunidad de darle un último adiós, pues se espera que Xavi Hernández le dé minutos. Incluso puede ser titular, en el que será el último partido que juegue en el Camp Nou.

Gerard Piqué/ Europa Press

Se marchará siendo uno de los mejores futbolistas de la historia de la entidad, como lo demuestran las 14 temporadas que ha disputado, y la gran cantidad de títulos que ha logrado. Lástima que no se pueda despedir con un título, y que tenga que hacerlo en un momento tan delicado. Pero como él mismo afirmó, no es un adiós definitivo, pues nadie tiene ninguna duda de que volverá más pronto que tarde, para ocupar un puesto en la directiva.

El propio Piqué ha dejado muy claro que su deseo es ser presidente en un futuro, y es evidente que algún día lo conseguirá. Lo que no se sabe es cuándo. Quizás todavía sea muy pronto, pero muchos sueñan con que sea el sucesor de Joan Laporta, con el cual ha acabado enfrentado, junto al resto de la directiva. Y es que al internacional español no le gustó absolutamente nada que hablaran de él de manera tan despectiva, y afirmaran que por su culpa, el Barça estaba hipotecado.

Una frase que ‘Geri’ no perdona, pues considera que no le han tratado con el respeto que se merece y que se ha ganado por su rendimiento, su compromiso y su actitud durante todos estos años.

Piqué ahorra 50 millones de euros al Barça

Con la salida prematura de Piqué, el Barça consigue ahorrarse, como mínimo, unos 50 millones de euros, pues es la cantidad que estaban obligados a pagarle por el año y medio de contrato que le quedaba, hasta junio de 2024, además del bonus de final de carrera.

Queda por ver si también perdona la deuda que el club tiene con él, y que asciende hasta los 80 ‘kilos’, una cantidad que Laporta espera que también puedan ahorrarse. Ese sería el último favor del ‘3’ al conjunto que se lo ha dado todo.