El Nissan Qashqai lleva muchos años siendo la auténtica referencia de la marca japonesa en nuestro país y siendo además uno de los modelos más vendidos en el segmento de moda en las carreteras españolas: el de los SUV de tamaño compacto.
Un modelo que compite mes tras mes y año tras año contra grandes nombres en las carreteras españolas como es el caso del Seat Ateca, el Kia Sportage, el Hyundai Tucson o el Skoda Karoq, entre muchos otros.
Eso sí, el problema en su caso es que, como ha ocurrido con la inmensa mayoría de modelos a la venta en España, su incremento de precio en los últimos años ha provocado que sean muchos los conductores que, buscando un súper cómodo, bien dotado de serie, atractivo en cuanto a diseño y con un buen nivel de calidad, prefiero apostar por el modelo que se queda justo un escalón por debajo en cuanto a tamaño, entre otras cosas porque es una opción bastante más barata.
El Nissan Juke gana cada vez más terreno
Y ese modelo no es otro que el Nissan Juke, un B-SUV que has mejorado mucho en esta segunda generación y que se convierte en una alternativa interesante a su hermano mayor. Es más que cierto que no se puede comparar con el Qashqai en lo que se refiere a habitabilidad y capacidad de carga, así como también en lo que se refiere a su equipamiento de serie en las versiones más sencillas, pero son muchos los que están dispuestos a renunciar a este tipo de cosas para hacerse con un coche más barato.
Contando con todas las promociones y descuentos actuales por parte del fabricante japonés, la versión más sencilla de este Nissan tiene un precio de partida que arranca justo por encima de los 22.000 €, un precio que evidentemente será más elevado teniendo en cuenta condiciones de financiación pero que siguen haciendo de él una alternativa muy interesante a modelos como el Seat Arona, el Kia Stonic, el Hyundai Kona o el Skoda Kamiq, entre otros.
Con una mecánica de gasolina de 114 caballos de potencia asociada a una transmisión manual y sin ningún tipo de sistema de hibridación, este modelo pasa por ser una opción sencilla pero más que correcta para moverse por entornos urbanos interurbanos, entornos que no dejan de ser el mejor terreno de juego de este tipo de modelos.
No es casualidad entonces que cada vez sean más los conductores que vean en este Juke, una opción bastante más barata que el Qashqai, una buena alternativa a su hermano mayor.