Tal y como ocurre en la inmensa mayoría de marcas, especialmente en las marcas premium, en BMW han optado en los últimos años por ampliar de forma notable la oferta dentro de su catálogo de modelos con carrocería tipo SUV. Por mucho que la marca alemana no haya abandonado como sí que lo han hecho en la inmensa mayoría de marcas generalistas a sus berlinas, el fabricante de Múnich es muy consciente de que son los SUV los que más alegrías les están dando a nivel de ventas en los últimos tiempos.
En este sentido, si bien es cierto que el X5 no es precisamente su modelo más vendido dentro de la categoría de los SUV, sí que pasa por ser una de las mejores opciones, entre otras cosas porque es un modelo que se sitúa un escalón por encima de los X1 y X3 sin llegar a tener el altísimo precio que tiene el X7, el rey de la marca en este sentido.
Un X5 que tiene varios rivales de altura, entre ellos el Mercedes GLE, el Audi Q7 o el Volvo XC90. Es precisamente este último modelo, el modelo sueco, es que pasa por ser una de las mejores alternativas al modelo alemán, entre otras cosas porque acaba teniendo un precio de partida gracias a la oferta actual bastante más bajo.
El Volvo XC90, un buen ‘plan b’ al BMW X5
Mientras que la versión más barata del BMW tiene un precio que se sitúa por encima de los 85.000 € en la versión que llega con el acabado más sencillo y un motor diésel de 298 caballos de potencia asociado a una transmisión automática y a un sistema de micro hibridación ligera que le permite lucir la etiqueta ECO de la DGT, el Volvo se sitúa un escalón por debajo gracias a la oferta actual que rebaja su precio en más de 13.000 €.
De esta forma, su precio de partida contando con todas las promociones se sitúa por debajo de los 70.000 €, en su caso también en su versión de acceso con el acabado más sencillo y con un motor también diésel y también con un sistema de micro hibridación ligera que le permite lucir la buscada etiqueta de la DGT pero con una potencia de 235 caballos.
Como no podía ser de otra forma, y más tratándose de dos de los modelos mejor dotados de las dos marcas, no existe mucha diferencia en cuanto al nivel de calidad de sus materiales, su tecnología y sus acabados, siendo así dos opciones muy top para aquellos que tengan presupuestos elevados. Eso sí, con una mejor relación calidad precio, el Volvo, para muchos, es una opción más recomendable.