Por mucho que en los últimos años la carrocería de los SUV se haya impuesto en la inmensa mayoría de carreteras a nivel europeo, entre ellas las españolas, siguen siendo muchos los conductores que echan de menos a los monovolúmenes, un tipo de coche que tuvo mucho éxito en nuestro mercado hace ya unas décadas pero que hoy en día ha desaparecido completamente del catálogo de la inmensa mayoría de fabricantes.

Si bien es cierto que algunos de los SUV del mercado actual son opciones muy interesantes a nivel familiar, el tipo de coche que se está imponiendo en este sentido son las furgonetas compactas, modelos que hasta hace algunos años apenas contaban con el cariño de sus fabricantes entre otras cosas porque eran modelos destinados casi íntegramente a la división de vehículos comerciales.

 

Sin embargo, tan solo hace falta ver las novedades en este segmento para darse cuenta de que marcas como Renault, Ford, Peugeot, Opel o Citroën han dado un paso muy importante adelante en este sentido, conscientes de que son muchas las familias que buscan mucho espacio y mucha capacidad de carga pero no quieren saber nada de los SUV, entre otras cosas porque son modelos más caros.

El Citroën Berlingo más sencillo cuesta menos de 25.000 euros

Un buen ejemplo de ello es el Citroën Berlingo, toda una referencia desde hace ya muchos años en este segmento y que ha estrenado una nueva generación recientemente en la que este modelo adopta el nuevo lenguaje de diseño de la marca para seguir siendo una opción interesante para aquellos que buscan, sobre todo, un maletero enorme, un equipamiento sencillo pero más que correcto y un motor que apenas consuma para realizar muchos viajes en familia.

 

Así, ahora podemos hacernos con la versión más sencilla de este modelo por un precio que se queda por debajo de los 25.000 € teniendo en cuenta todas las promociones y descuentos. Si bien es cierto que a nivel de equipamiento y calidad de materiales es un modelo que no se puede comparar con algunos de los SUV de su tamaño, el hecho de que cuente con un maletero gigante de casi 800 l y que llegue con un motor diésel de 100 caballos de potencia asociado a una transmisión manual que promete un consumo de unos 6 l lo convierte en una opción realmente interesante.

Un tipo de coche que ha llegado para convertirse en el socio perfecto de aquellas familias que necesitan mucha capacidad de carga y mucho espacio y habitabilidad para afrontar largos viajes, por lo que no es casualidad que se esté convirtiendo en un segmento de los que más ha crecido en los últimos años en España y en Europa.