Como ya sabes, el buen funcionamiento del sistema de frenos de un coche es imprescindible para evitar accidentes con daños físicos y personales. Y si te preguntas si debes cambiar las pastillas de freno, a continuación sabrás lo que debes tener en cuenta y cómo comprobar si debes hacerlo.
El sistema de frenada es uno de los elementos que siempre ha estado en los vehículos. Aunque su sistema no ha variado demasiado a lo largo de los años. Se ha mejorado en materiales y en implementación, pero no deja de ser un sistema compuesto por unas pinzas que llevan integradas unas pastillas, que se pone en marcha cuando pisamos el pedal del freno y comprimimos el líquido de frenos. Este activa las pinzas, que se cierran y reducen la velocidad o detienen el vehículo.
Llevar un buen mantenimiento de las pastillas de freno es imprescindible para evitar lamentaciones
Es primordial conseguir una frenada óptima y eficaz. Y para ello es necesario tener las pastillas en buen estado. Si no es así, la distancia de frenado aumenta, aumentando así el riesgo de causar daños materiales y personales.
Las pastillas de freno son se averían, se desgastan, lo que significa que requieren un mantenimiento periódico y que deben ser sustituidas si están desgastadas. En este sentido, como habrás imaginado, no debemos acudir a un desguace para comprar unas pastillas de freno de segunda mano. Ya no solo porque pueden estar desgastadas, sino porque si pasa el tiempo y no se le da uso se endurecen, con lo que podrías encontrar pastillas de freno que estén casi por estrenar pero que no sean eficaces.

Hay varias formas de percibir si tenemos las pastillas desgastadas. Por ejemplo, que la distancia de frenado haya aumentado o que al pisar el pedal de freno escuchemos un sonido que chirría. Esto pasa si las pastillas están por debajo del mínimo nivel de seguridad o cuando el disco de freno se está desgastando. En caso de que hayamos cambiado las pastillas y sigamos escuchando el sonido chirriante, es posible que se haya acumulado polvo entre las pastillas y el disco. Esto se soluciona aplicando aire a presión.
Así podemos comprobar si debemos cambiar las pastillas de freno
Muchos coches en la actualidad nos mandan un aviso en forma de piloto encendido en el cuadro de instrumentos cuando las pastillas están desgastas. En este caso deberemos llevar el coche al taller cuanto antes. No obstante no siempre es así. En ese caso tendrás que comprobarlo tú visualmente.
Lo mejor en este caso es desmontar las ruedas y verlo con nuestros propios ojos. Si la pastilla está por debajo de los 2 milímetros, ha llegado la hora de cambiarlas. No hay que confundir la pastilla con el soporte, que suele ser del mismo color.
El precio de cambiar unas pastillas de freno es de unos 30 euros. Y el tiempo que debe invertir el mecánico son unos 30 minutos de mano de obra. Aunque al final dependerá del tipo de coche que tengamos.