Cuando Dacia irrumpió en la escena española hace ya muchos años no fueron pocos los que pronosticaron que los modelos de la marca rumana no iban a triunfar en España dado su diseño, sus prestaciones y sus equipamientos. El tiempo no ha hecho otra cosa que demostrar que estas opiniones estaban más que equivocadas.
Y es que, si bien es cierto que Dacia sigue siendo una marca a la que acuden de forma mayoritaria los que buscan precios bajos, también lo es que, poco a poco, con cada nueva generación de uno de sus modelos, los rumanos han ido ganando peso ente otros tipos de conductores.
Sus bajos precios siguen siendo su mejor arma, pero también el hecho de contar con la etiqueta ECO de la DGT en muchos casos o por el hecho de ser modelos que, por el mismo precio que un generalista, llegan mucho mejor dotados, conquistan a cada vez más consumidores.
Eso sí, uno de los principales problemas a los que se enfrenta Dacia y que no hace otra cosa que dotar de argumentos a los que apuntan que siguen siendo modelos muy sencillos es que son modelos que no son tan seguros como el resto.
Las pruebas EuroNCAP ponen en el punto de mira a Dacia
No es que sea ningún secreto que, en materia de seguridad en Europa, as pruebas Euro NCAP son las que marcan el camino. De hecho, si un modelo no las supera, no se puede vender en el viejo continente.
En este caso es un sistema que puntúa a nivel general la seguridad de los modelos puestos a prueba con un sistema de calificación, siendo 5 estrellas la calificación máximo y 1 estrella la calificación mínima.
Y esta es precisamente la que ha obtenido el Dacia Jogger. ¿Implica eso que el recién llegado de Dacia es un modelo inseguro? Ni mucho menos. Lo que sí que implica es que es un modelo que, en materia de seguridad activa, sistemas de prevención de accidentes o asistentes a la conducción, está un paso por detrás de la gran mayoría.
De hecho, las peores puntuaciones han llegado en las categorías de Protección de los usuarios vulnerables de la carretera, un 41%, y de Asistentes de conducción, con 39%. En las otras dos, Protección de ocupantes adultos y Protección de ocupantes infantiles, los resultados han sido buenos: un 70 y un 69 por ciento respectivamente.
Desde hace ya unos años estas pruebas se han endurecido, y son modelos muy básicos o que tienen ya unos años los que, al no contar con sistemas como el sistema de frenado multi colisión o el reconocimiento de señales, entre otros, obtienen resultados por debajo de la media.
Por otro lado, cabe destacar que la unidad del Jogger puesta a prueba contaba con la tercera fila de asientos y que, añadiendo aún más mala suerte para la marca, el sistema de advertencia de cinturón de seguridad desabrochado no funcionó como debería, por lo que la puntuación fue aún peor.