El Toyota RAV4 puede presumir de ser uno de los modelos que más ha ayudado al crecimiento de la marca japonesa en nuestro mercado. Si bien es cierto que los últimos tiempos han sido muchos los rivales directos de este modelo que han apostado por intentar robarle muchas ventas de la mano de motores híbridos auto recargables, lo cierto es que el modelo de Toyota sigue siendo toda una referencia en este sentido.
El problema en este caso es que, como bien saben todos aquellos que tienen intención de hacerse con este RAV4, no es que sea precisamente un modelo barato. Es más, tal y como podemos ver en el configuradores del fabricante, la versión más sencilla de todas supera los 40.000 €, convirtiéndolo en uno de los modelos más caros de su categoría dejando de lado las marcas premium.
La parte positiva es que, si el presupuesto no es un problema, este modelo llega muy bien dotado de serie en todos los sentidos, especialmente a nivel de motor con una mecánica de gasolina híbrido auto recargable de más de 200 caballos de potencia que pasa por ser una de las mecánicas, como es habitual en la marca japonesa, más eficientes y más fiables del mercado, además de llegar junto a un nivel de acabados y de equipamiento muy Top ya desde la versión más sencilla.
Un RAV4 de segunda mano sigue siendo una mu buena opción
Pero como bien saben también seguramente muchos de los que buscan conocerse con uno de estos Toyota, precisamente la propia marca tiene un sistema de venta de coches usados, coches que evidentemente han sido revisados por el propio fabricante japonés y que, teniendo en cuenta además el programa de extensión de garantía de la marca japonesa, pueden llegar a tener hasta 10 o más años de garantía.
Tal y como podemos ver en la sección de ofertas de coches de ocasión de Toyota, son muchas las unidades de un RAV4 que podemos encontrar para un precio por debajo de los 30.000 €, y no es que sea precisamente unidades ni muy veteranas ni con muchos kilómetros.
Hay unidades con poco más de 50.000 km, aunque la mayoría que rondan los 30.000 € suelen superar los 100.000 km. Eso sí, teniendo en cuenta la fiabilidad de estas mecánicas, es una cifra que no es que sea precisamente problemática. Evidentemente siempre es mejor optar por un coche nuevo, pero una de estas unidades por un precio que ronde los 30.000 € es una de las mejores opciones del mercado.