Uno de los modelos más emblemáticos de Ford, una de las marcas más icónicas de la industria del automóvil, es el Mustang, un modelo que puede presumir de ser el emblema a nivel mundial de los famosos muscle cars americanos, modelos que destacan sobre todo por tener unos motores extremadamente potentes y una imagen muy agresiva y contundente lejos de las formas más elegantes y aerodinámicas de los deportivos japoneses o europeos.

Un Mustang que, por mucho que la industria haya entrado en una fase de transición hacia los motores eléctricos y, sobre todo, en un momento en el que ya cada vez menos fabricantes siguen apostando por enormes motores de combustión, sigue siendo toda una referencia en su segmento.

 

Es por eso que no eran pocos los que esperaban con muchas ganas la nueva creación de Shelby, el especialista que lleva años asociado con Ford y que ha sido el encargado de llevar a cabo las modificaciones más top y de crear los Mustang más bestias y deportivos.

Shelby convierte al Mustang en una bestia

En este sentido, sino bien es cierto que Ford ha implementado muchas medidas para que su nuevo Mustang no pueda ser objeto de modificaciones por parte de sus conductores, el hecho de que Shelby sí que tenga ese privilegio parece que ha dado alas al especialista para crear el Mustang más bestia hasta la fecha.

 

Pero lo curioso en este caso es que, más allá de que el V8 de gasolina de 5.2 litros pueda llegar a ofrecer hasta 1.000 caballos de potencia si se llena el tanque de gasolina, si en vez de utilizar gasolina se hace uso de etanol E85, la potencia total asciende a los 1.300 caballos.

Eso sí, hacerse con este Shelby GT500 Code Red no va a ser precisamente sencillo. Por un lado porque el especialista ya ha anunciado que tan solo va a fabricar 30 unidades y, por otro, por que el paquete de modificaciones, con cambios también en el apartado visual y una configuración específica, tiene un precio de 72.000 euros, un precio al que hay que sumar los 60.000 euros del propio Ford Mustang, por lo que seguramente, por mucho que estas 60 unidades se vayan a vender sin problema, van a estar al alcance de unos pocos.