No es que sea precisamente ningún secreto que la era de los vehículos con motores de combustión está cada vez más cerca de llegar a su fin. En este sentido, si bien es cierto que la inmensa mayoría de los coches actualmente a nivel mundial siguen siendo coches que funcionan con motores de gasolina o con motores diésel, también lo es que cada vez son más los eléctricos que tienen peso en las carreteras.

Es más, un buen ejemplo de ello es que, en este 2023, el modelo más vendido en Europa no está siendo otro que el Tesla Model Y, un eléctrico. Como no podía ser de otra forma, cabe tener en cuenta que este aumento de la venta de los eléctricos llega también de la mano de las estrategias por parte de instituciones como la Unión Europea, que están intentando ir poco a poco relevante el parque automovilístico europeo apostando cada vez más por los eléctricos a través de ayudas gubernamentales.

Dentro de unos años, de hecho, tan solo se podrán vender coches nuevos en Europa que sean coches 100 × 100 eléctricos, de ahí que la inmensa mayoría de fabricantes estén apostando cada vez más por este tipo de modelos sin olvidarse evidentemente de los de combustión, entre otras cosas porque son los que de momento siguen dándoles más alegrías.

La Agencia Internacional de la Energía tiene un dato demoledor

En este sentido, no ha sido otra que la Agencia Internacional de la Energía la que acaba de publicar un informe en el que apunta algunos datos realmente interesantes acerca del futuro de los eléctricos.

Tal y como apuntan desde esta agencia, actualmente son alrededor de 27 millones de eléctricos los que circulan en las carreteras a nivel mundial, una cifra ya importante pero que sigue siendo muy menor respecto a los modelos con motores de combustión.

Sin embargo, desde el propio organismo apuntan que, por ejemplo, en este 2023 uno de cada cinco coches vendidos nuevos es un eléctrico, una radio muy superior a la de el pasado 2020, cuando se vendía tan solo un coche eléctrico de cada 25 coches nuevos.

Pero el dato seguramente más interesante de este informe es el que apunta que dentro de apenas siete años, es decir, en 2030, el número de eléctricos en las carreteras a nivel mundial se habrá multiplicado por 10, siendo así una tecnología mucho más asentada y un tipo de motor que tendrá mucho más protagonismo en todos los mercados, especialmente en el de Europa, Asia y Estados Unidos.